miércoles, 29 de noviembre de 2017

El niño y el pez



 Una vez, un niño contemplaba, como hacía cada día, su pecera con un hermoso pez que iba de un lado a otro de su espacio habitual.
El niño lo contemplaba, y le gustaba hacerlo, porque en el fondo, se encontraba bien con él y toda su belleza. Así cada día. Se pasaba mucho tiempo ante la pecera y su inquilino. Cuando era la hora, le daba de comer, o bien pasaba un trapo para limpiar un poco el vidrio que protegía a su amigo marino.
Al cabo de un rato de estar allí vio como el pez se le acercó mirándole y cuando estaba justo ante él y al otro lado del vidrio le dijo:
-         Llévame a casa.
El niño, como si fuera algo normal que los peces hablaran, le respondió:
-         ¿Por qué quieres ir a casa? Ahora estás aquí conmigo, en esta pecera que es tu casa. ¿No te gusta?
-         Tú siempre estás conmigo un rato pero luego te vas y estoy muchas horas solo. ¡Llévame a casa!
-         ¡Pero si yo te doy todo lo que necesitas! ¿No te gusta la comida?
El pez lo miró y volvió a deambular por aquella pecera una y otra vez.
Al día siguiente, aquel niño, como siempre, se acercó a la pecera cuando volvió de la escuela. Miró al pez, le sonrió y pareció decirle:
-         Ya estoy aquí y me gusta encontrarte en casa cuando me levanto o llego de la escuela.
El pez le volvió a decir:
-         Llévame a casa.
El niño le respondió:
-         ¿Quieres que te lleve al mar?
-         ¡Sí! – le respondió el pez.
-         ¿Por qué quieres irte de aquí?
-         Tú te vas y me quedo mucho tiempo solo. Tú juegas con tus amigos y yo continuo siempre solo. Cuando llegas, eres el único que me saluda y está conmigo un buen rato, pero no puedo jugar contigo ni nadar como a mí me gustaría porque no tengo el espacio que necesito.
El niño le escuchaba mientras su mamá lo contemplaba desde la cocina cómo miraba fijamente la pecera y al pez en concreto.
-         ¡Llévame a casa, por favor! – dijo el pez casi implorándole.
-         Pero yo quiero verte todos los días. Me gusta estar contigo. ¿No te gusta la comida que te doy? ¿Quieres más espacio para nadar?
El pez cerró sus ojos, como triste,  por estar donde no quería estar. Los volvió a abrir y dijo a su amigo andante:
-         Necesito estar con más peces y tener todo el espacio para jugar, nadar y explorar. Necesito mostrarme tal como soy, y aquí, solo puedo mirar, observar y hacer los mismos movimientos una y otra vez. No puedo hacer todo lo que me gustaría hacer. Llévame a casa.
El niño se puso triste comprendiendo a su pequeño amigo.
Pasó el resto del día pensando en lo que se le había dicho por parte de alguien que él amaba muchísimo. Por un lado le supo mal el hecho de no poder nadar y jugar con otros peces, y por otro, si decía a sus padres que compraran más peces, no tendría el espacio para hacer todo lo que él podría llegar a hacer. Por momentos sentía la tristeza interior de su amigo. Giró la cabeza para mirarlo en la distancia y veía la belleza y la vitalidad que desprendía. Vio también, la serenidad que mantenía al aceptar una situación que no era la que le correspondía para poder ser del todo libre.
A los pocos días, su clase hizo una visita a un gran acuario marino junto al mar. Él, sin que nadie se enterara sacó a su amigo de aquel pequeño espacio y lo puso en una bolsa de plástico con agua, guardándola en su mochila escolar para dar la libertad al pequeño pez.
Visitaron el acuario, y luego, debido al buen tiempo decidieron ir a la playa a desayunar todos juntos. El niño, con su mochila, se separó un poco del grupo en unas rocas que allí habían. Entonces sacó la bolsa de agua donde se encontraba el pez y le puso mirando al mar.
-         ¿Quieres que te deje aquí? – le preguntó el niño.
El pez desprendió una lágrima, haciendo una expresión de nostalgia y alegría a la vez por querer volver allí donde nació.
Se giró para mirar al niño y le dijo:
-         Gracias. Sí, aquí está bien.
El niño deshizo el nudo de la bolsa de plástico, la bajó hasta tocar el agua y decantó allí donde nuestro pez se encontraba. Como impulsivamente, nuestro pez se alejó rápidamente, girando entre sí y muy contento. De repente volvió a la orilla y le dijo al niño:
-         Aunque puedas tener todo lo que necesites para vivir, lo importante se encuentra en tu interior. Haz que lo que sientes te haga sentir bien. Vive según sientas porque entonces serás tú, sino, siempre te dará la sensación que te falta algo. Gracias amigo andante. Siempre te recordaré.
Y el pez se fue contento aguas adentro.
El niño lo contemplaba y sintió la libertad que aquel pez sentía en su interior. Se dio cuenta como sus ojos desprendían alguna que otra lágrima, sintiendo que había hecho lo correcto con aquel amigo que amaba.
Giró la cabeza donde se encontraba el grupo de clase. Recogió su mochila y se dirigió hacia todos aquellos que formaban parte de sus amigos y se puso a jugar con ellos.
Nuestro pez se adentró en las profundidades de aquel mar, llegando a encontrar a su verdadera familia que lo aceptaron solo con verle y alegrándose de su llegada con ellos.
Pasaron los años, y nuestro niño dejó de ser un niño. Ahora tenía un aspecto juvenil y dinámico. Su presencia era casi como la de un joven adulto.
Un día se dio cuenta que se encontraba en un lugar donde conocía y que en su momento liberó a un pequeño amigo. Se dirigió hacia el lugar donde fue para recordar aquellos momentos, quedándose unos instantes sentado en una de las rocas que allí había. Contempló el mar pensando que su amigo habría podido realizarse con todo su resplandor y poder crear una descendencia que permitiera transmitir todo aquello que le enseñó.
De repente bajó la cabeza y vio como el agua dejó bajo sus pies un trozo de papel escrito. Se agachó. Alargó un brazo, cogiendo este papel mojado. Con delicadeza miró de leer lo que ponía:
-         “Hiciste lo que debías de hacer, así tu vida te llevará donde puedas transmitir lo que sientes para la liberación de tu especie. Solo existe el Amor.”

El joven sonrió. Luego, miró al horizonte donde el mar expande su presencia, sintiendo una paz en su interior.

miércoles, 22 de noviembre de 2017

La maestría de la escasez



Es sabido que hemos de centrarnos en aquello que queremos conseguir en la vida, en nuestro camino hacia la realización y la materialización de lo que hemos venido a hacer en esta vida actual.
A veces, gran parte de los seres de la humanidad viven situaciones que no están en consonancia con lo que desearían en sus vidas. Cada experiencia y obtención es consecuencia de un estado interior que nos llega a materializar aquello que sentimos. Una cosa es lo que podemos llegar a pensar, y otra lo que sentimos. Lo obtenido en nuestra existencia actual se basa en lo que sentimos, no en lo que pensamos. Podemos querer tener una vida concreta, pero,… ¿estamos preparados para ella? ¿Realmente lo que vivimos y nos desagrada está dirigido hacia vivir según nosotros queremos o según lo que nuestra alma necesita?
Hay infinitas posibilidades de alcanzar un aprendizaje para desbloquear algún aspecto de nosotros que nos puede ayudar a obtener lo que tanto deseamos en la vida. Una de las grandes herramientas para ello, es la escasez en nuestra vida, el no tener para lo que aparentemente necesitamos y poder hacer frente a nuestro día a día terrenal. Digo terrenal, porque es en lo que más el humano se centra para su felicidad. ESCASEZ. Cuando hablo de escasez me refiero a no poder seguir el ritmo material, terrenal de nuestra vida. No nos llegan los aspectos del exterior para hacer frente a nuestras necesidades básicas.
Cuando alguien “no tiene”, viviendo integrado en los convencionalismos sociales,  su vida se convierte en una preocupación y en una oportunidad para replantearse su visión de la vida y su papel en ella. Al no tener algo procedente de lo externo, cuando se ha estado viviendo pendiente de ello constantemente, ¿os habéis planteado revisar vuestro camino y lo que sentís interiormente según os gustaría vivir? ¿Seguro que aquello que vuestro interior os habla, lo estáis llevando a término, o continuáis con lo establecido por miedo a cambiar, a lo nuevo o porque os sentís indefensos y limitados ante la vida? ¡Hay tantas razones por lo que uno atrae el supuesto malestar en su vida!
En diferentes momentos de mi experiencia viví al límite de la subsistencia. Me quedé sin nada. Veía como la vida me iba quitando poco a poco todo aquello que tenía. Primero fue el dinero y a continuación una serie de consecuencias derivadas de la ausencia absoluta de unos ingresos financieros: sin coche, el  no poder comer, y al final, sin casa, teniendo que dejarla por no poder hacer frente a ella y después de ser reclamado en juzgados por una demanda de los propietarios al no poder abonar las mensualidades y liquidar lo endeudado.
Sé lo que uno puede llegar a sentir cuando todo lo pierde, todo y así, no hay nada que suceda que no tenga un sentido mayor.
Mi más extremada escasez ante la vida me llevó a una aceptación inicial ante lo vivido y a no inquietarme. No podía hacer nada más. Era lo único que estaba a mi alcance. Procuraba mantener la calma ante mi situación. Yo confiaba plenamente que todo acabaría bien, a pesar de los pesares. Os estoy hablando de una situación extrema donde solo te queda tu presencia sin más, pero con todo lo que en ti hay. Aceptaba la situación y ponía de mi parte para salir de los momentos que me encontraba. Tenía una Fe absoluta conforme todo se resolvería y mi vida cambiaría por completo teniendo para todo lo que necesitase. Sinceramente así lo creía, a pesar de todo mi presente de aquel momento.
Cuando uno se encuentra ante una situación no querida, tened presente que no es porque sí. Detrás de los instantes vividos hay un sentido para un aprendizaje que cada uno que pasa por instantes como éstos debe de encontrar y darse cuenta de lo que representa para él y su vida. Sí os puedo decir que no defallezcáis y confiad plenamente conforme esta situación pasará, haciendo vosotros vuestra parte de introspección y lo que os hace sentir en vuestro interior porque esto que sentiréis podrá ser la clave para desbloquear estos estados de escasez en vuestra vida. ¿Seguro que vais por el camino adecuado? ¿No creéis que vivís con miedos en vuestra vida? ¿Qué representa el hecho de no tener nada de dinero? Hay tantas reflexiones, pero solo uno puede saber la dirección adecuada de su responsabilidad del hecho y ante la vida.
Cuando todo se nos quita, es que algo mejor os está esperando. Este todo representa cualquier circunstancia que pueda existir, como el perder la familia, la pareja, la parte económica, la creatividad, una casa o piso donde vivir,….etc. Esta es mi experiencia y la de todos aquellos de mi entorno que lo han vivido o  que me han venido que he podido comprobar.
 Cuando algo o todo en nuestra vida desaparece tiene un sentido mayor. Cierto que representará empezar de cero, pero los fundamentos llegarán a ser esta vez, más sólidos que nos permitirán elevarnos y llegar mucho más alto que cuando vivíamos como antes. Para esto, nosotros debemos de poner de nuestra parte. Es una manera que el universo nos dice:
-         Amada alma, te has movido en la incerteza y el desconcierto de tu camino. Has querido apegarte y andar por un sendero alejado de tu proceso. Ha llegado la hora de empezar de nuevo, pero esta vez, según la Voluntad Superior. Ves a tu interior para empezar a escuchar a tu corazón y poner en práctica todo aquello que te susurre. No temas. No dudes y piensa que nunca estarás solo. No se te ha quitado para quedarte sin nada en lo que resta de tu vida, todo lo contrario, para conseguir el todo y encontrarte a ti mismo, sintiendo el amor y la felicidad en ti. No te centres en lo material, porque te daremos todo lo que necesites en cada momento de tu vida. Confía. No dudes. Ten Fe. ”

¿Qué debemos de aprender con una experiencia como esta? El aprendizaje puede ser diferente según cada uno, pero sí es una manera de decirnos que así no podemos continuar en nuestra vida. Debemos de hacer un cambio para llegar a sentirnos realizados según sentimos en nuestro interior. Si nosotros no hemos sido capaces de hacer estos cambios solos, el universo nos da una mano para que así sea.
¿Te has planteado empezar a tener pensamientos positivos? ¿Te has planteado no criticar ni juzgar a los demás, a tomar partido por uno o por otro? No te limites y escucha a tu corazón.
¿Qué tal si empiezas a ir dentro de ti y buscar la paz, sintiendo el amor y la tranquilidad en tu interior, como estado normal del día a día? Debemos de pensar que aquello que sentimos, atraemos. ¿Qué quieres atraer en tu vida, en el sentido, de cómo quieres encontrarte, sentirte en tu nueva vida? Eso, debes de empezar a sentirlo ahora, ¡ya!, en estos momentos. Esto es lo que atraerás porque lo irás sintiendo, y al final, quedará integrado en ti. Debemos de pensar que el universo siempre nos concede aquello que pedimos según lo que sentimos, por lo tanto, al final se te concederá de una manera permanente.
No hay nadie que viva una situación límite porque sí. Cada una de ellas tiene un sentido superior y habrá sido una indicación que ya habrá llegado nuestra hora para dar el gran cambio: de vivir desde y según el exterior, a hacerlo según nuestro interior, lo que vayamos sintiendo a cada momento.
Una de las características de los tiempos que vivimos es el vivir desde el interior, escuchando la voz de nuestro corazón. Son los tiempos del CORAZÓN. Él nos llevará a aquel quien somos en verdad, y entonces, ya solo sentiremos la paz, el sosiego, la calma, la alegría y el amor en su estado más puro en nosotros. Cuando así es, puedes tener presente que ya nada te faltará para llegar a ser tú y sentir la felicidad en tu vida actual. Todo lo que necesites te será dado.
Puede ocurrir que se consiga por pasos, pero una vez has dado un paso, ya no hay vuelta atrás para deshacer este paso de sentir el amor en ti. Una vez empecemos a activar nuestra consciencia, ya no nos podemos desconscienciar. Cuando adquirimos un grado de amor, de vibración más alta a la anterior, ya no podemos volver atrás. Siempre vamos evolucionando y acercándonos más, recordando aquel quien somos.
A todos los que podáis estar viviendo momentos de escasez en vuestras vidas, del tipo que sea, os diría que no defallezcáis y que lo vivido contiene un aprendizaje mayor para nuestro resurgir de este fondo que quizás hayamos tocado. A veces debemos de tocar fondo para despertar el Ave Fénix de nuestras cenizas ancestrales y poder volar más allá de las limitaciones que nos inculcaron y aceptamos como nuestras.
No hay nada porque sí. Todo lo vivido ha tenido un sentido dentro de nuestro proceso. Cuando aprendemos e integramos este aprendizaje, las puertas se abren para vivir según lo que cada uno ha venido a hacer.
Cada uno de nosotros somos los responsables de nuestra vida. Nuestras palabras, pensamientos, actos  y actitudes ante la vida, nos marcan y son una manera de expresar en voz alta lo que queremos para nosotros.
¿Qué es lo que tú quieres para ti? ¿Qué tipo de vida quieres vivir a partir de ahora en adelante? ¡Siéntelo en ti y así será! Aquello que sientas, lo atraerás.
Vive tu presente y escucha a tu corazón, que él te hará saber en todo momento los pasos a dar en tu vida para tu mayor bien y el de todos.
Recordad que todo está regido por el Amor, por lo tanto, solo podéis esperar lo mejor. Confiad amadas almas.

Que el Amor y la Paz sean en cada uno de vosotros.



miércoles, 15 de noviembre de 2017

El canto del silencio



Nuestro fiel acompañante en los momentos más necesitados, nos abraza, respetando nuestra presencia sintiendo lo que sientas en cada momento. Aposentado en nuestro ser, abre sus brazos para ser aceptado cuando necesitemos de instantes de conocer nuestra verdadera historia, situación o verdad ante la vida que nos encontramos avanzando entre los lazos de un pasado y nuestra esencia abriéndose paso entre los obstáculos, la indiferencia y la ignorancia de nuestra racionalidad apegada a unos troncos ancestrales procedentes de lo que ya no es.
Nuestro fiel acompañante en medio de mareas emocionales, dudas, incertidumbres y resistencias, respeta nuestro espacio y nos consuela con su presencia. A ti, amado Silencio, mano donde acogerse en los momentos de más sonoridad en nuestra vida e impulsos para mostrar y expresar aquello que sentimos.
¡Oh, amado Silencio procedente de un más allá para apaciguar y calmar las mentes humanas de este mundo terrenal! Hemos invadido tu espacio, ignorado tu presencia, sin saber el por qué de tu melodía apaciguadora y canto de liberación para todos aquellos que quieran saber de ti. Aceptarte, es permitir que nuestra voluntad se vea reflejada en un espejo donde puedas darte cuenta de la veracidad de tu situación actual. Es poder ver la luz tan anhelada por nuestro interior para abrir su puerta y airear todo aquello que pueda haber en nosotros que no esté en consonancia con nuestra verdadera esencia.
¡Oh, amado Silencio! Estar contigo nos permite ir más allá del raciocinio y poder sentir, porque tu presencia está abrazada con el sentir innato que cada uno posee.
Momentos preliminares para preparar tu presencia en cada uno, aireará el interior de cada humano que se predisponga a encontrar y conectar con su verdadera esencia.
Tú, Silencio eterno, que nos ofreces tu lucidez para poder hacer las paces con nosotros mismos y crear la cuna para el bienestar de nuestros pasos a dar. A ti, amado Silencio, procedente de las estrellas y más allá de nuestra presencia actual, a ti, me entrego por momentos para sentir y observar la situación que pueda estar viviendo y establecer la armonía en mi interior y todo mi ser, para que mi alma pueda mostrarse con todo su resplandor y majestuosidad.
¡Oh, amado Silencio!, que durante milenios te hemos ignorado y no aceptado como parte de nuestro proceso, ahora me abro a ti y me dispongo a sentir tu canto, derramando tu amor hacia mi esencia y todo mi ser.
Dejo que me abraces y me hagas ver lo que en medio del tumulto diario donde puedo navegar, permitas que pueda dilucidar el camino a seguir según lo establecido por mi alma. Tu presencia ilumina mi camino y me muestra todos aquellos aspectos ignorados o escondidos inconscientemente para no desapegarme de todo aquello que limitan mis pasos y mi proceso en esta vida actual.
Tú, siempre expandes mi interior y mi visión de los hechos. Cuando estamos juntos me transportas más allá de mi presente y me haces sentir mi esencia y aquello que mi corazón susurraba para mi mayor bien, aunque quizás, no siempre fue escuchado y atendido.
Con los años, nuestro amado Silencio ha aprendido a estar con cada uno de nosotros para cuando lo podamos llegar a necesitar. Él, cuando le cogemos de la mano y nos abrazamos nos hace sentir el amor que somos. Nos lleva a restablecer nuestro posible estado inicial y nos eleva hacia la lucidez y el amor de nuestra verdadera esencia, la cual, a pesar de todo nuestro rechazo a lo largo de las encarnaciones, continúa estando con nosotros, siendo paciente con nuestro proceso evolutivo de recordar quien en verdad somos.
Nos encontramos en tiempos donde nuestro querido acompañante, nos invita a cooperar con él para la creación de una nueva Tierra y una Humanidad resplandeciente donde el Amor sea la unión con todos los seres que habitemos el nuevo mundo.
Empecemos a estar en nuestro amado SILENCIO para poder permitir la recuperación del estado interior que nos abrirá las puertas de la reconexión con nuestra alma, y poder con el tiempo, llegar a mostrar nuestra verdadera esencia Divina que cada uno es.
El Silencio nos abrirá las puertas de nuestra Divinidad. En él sentiremos la verdadera energía que estamos irradiando, así como nuestra esencia innata, el Amor que nos elevará y permitirá llevar a término aquellos pasos que necesitemos dar para llegar a aquel quien en verdad somos.
Todos los grandes maestros espirituales han sabido del Silencio y cómo utilizarlo para su sendero de Ascensión.
Te invito, amada Alma, que a partir de hoy abras tu interior para tener en cuenta y abrazar aquel acompañante que siempre ha estado contigo para cuando necesites unos momentos de calma, lucidez y claridad en relación a tu estado interior.

El Silencio me ha enseñado mucho de mí.
Ha estado un maestro donde, sin imposición, me ha transmitido la verdad de lo que iba viviendo a lo largo de los años. Lo llegué a aceptar en mi vida, y ahora, él y yo somos Uno, teniendo su espacio cada uno cuando nuestra alma así lo determine.
Sigo mi camino entre el sosiego y el amor que siento en mi interior. Ha sido, y es, a través del Silencio que a lo largo de los años, pude llegar a discernir qué era lo más adecuado en mi camino y lo que no. Pude llegar a sentir con intensidad mi verdadera esencia y mi naturaleza como ser encarnado que era, sabiendo mi sentido en esta vida actual y mi misión.
El silencio está en contacto continuo y relacionado con la meditación, los momentos de interiorización, con la naturaleza y los estados internos alejados del mundanal ruido que nos rodea en medio de nuestro día a día ajetreado.

Abrid vuestras mentes para dejar un espacio para el Silencio. Él os ayudará a retornar a vuestro estado inicial.
¡Hay tanta sabiduría inmersa en el Silencio!
¡Hay tanto Amor irradiando desde la cuna del Silencio!
Aceptemos todo lo que el universo nos permite utilizar para el mayor bien, no tanto de nosotros, sino el de todos. Recordemos que cada uno de nosotros es una Fuente donde beber o recibir todos aquellos que nos rodean.
Que todo lo emitido desde el centro de nuestro corazón sea el Amor que todos somos. Que nuestra Divinidad pueda mostrarse con toda su majestuosidad y pureza.
Que el canto del Silencio eleve vuestro ser. Que su melodía armonice vuestro Espíritu y podáis volar sintiendo el Hogar del cual todos procedéis en este plano Tierra donde ahora todos coincidimos y colaboramos para su Ascensión.

Que el Amor y la Paz sean en cada uno de vosotros.

miércoles, 8 de noviembre de 2017

jueves, 2 de noviembre de 2017

Con David sobre la situación actual



 Después de un tiempo de no saber nada sobre David, a continuación os presento el último encuentro tenido con él:
-         ¡Hola David! Hace poco más de siete meses pudimos publicar nuestro último encuentro para ser transmitido. Desde entonces, supongo que ha habido cosas, situaciones que han cambiado a lo largo de los meses. ¿Qué resaltarías en relación a lo que está sucediendo?
-         Estamos liberando el pasado de cada uno. El interior de cada ser, de cada persona, está haciendo una gran limpieza, en el sentido de liberar y ya no aceptar algunas de las situaciones que hasta ahora ha ido viviendo y manteniendo.
-         ¿Puedes especificar un poco más estas palabras?
-         Cada vez hay más silencio en el interior de cada uno. Cada vez se adentra más en el interior de uno mismo para encontrar la paz, el sosiego y no querer convivir, o alejarse de todo aquello que hasta entonces no le hacía sentirse bien. Hay un cambio de dirección. Hasta hace poco se dirigía todavía, de una manera generalizada, hacia el exterior de uno mismo. La gente está descubriendo un paraíso en su interior donde no hay cabida nada de lo que él mismo ha creado en su vida diaria. Esto representa crear un estado donde el bienestar, digamos felicidad y paz, es posible. (Pausa). Lo que está sucediendo es una transformación del papel de la forma para que no sea sobrevalorada como hasta ahora, dando lugar y permitiendo avanzar unos pasos hacia la primera línea, el fondo de todo lo vivido.
-         Exactamente, ¿qué quieres decir con el fondo de lo vivido?
-         A menudo nos quedamos con lo que vemos a simple vista, pero todo lo que podemos observar o percibir con nuestra vista, solo es fruto de algo superior para el ser que está experimentando lo vivido. Se está empezando a no quedarse con la forma, con lo material, lo visto, sino con el sentido de lo sucedido que va más allá de lo que parece, a menudo, a simple vista. Cuando valoramos la imagen, estamos dejando de tener presente el motivo que ha creado esta imagen y el por qué se ha llegado hasta aquí, hasta este punto que ha creado un malestar, un dolor a uno de los involucrados o a todos ellos. Lo que nuestros ojos perciben solo es una resolución de todo un proceso para llegar a este punto. Entonces, nos tendríamos que preguntar: ¿qué me está diciendo esta situación? Cuando lo observamos sin creencias, sin juicio ni crítica, sin tomar partido por uno o por el otro, entonces, nos daremos cuenta que más allá de lo sucedido hay una base, un motivo de aprendizaje para entender nuestra vida, la de aquel o aquellos que se vean involucrados en el hecho. Cuando se encuentra la raíz de lo sucedido, entonces, aprendemos y podemos dar los pasos hacia su prevención para otras veces y crear un mayor bienestar en nosotros. Esto significa frenar aspectos de nuestro pasado para que no intervenga en nuestro presente. Significa no permitir que lo que fue, ahora sea, porque cada uno ya no es el mismo que tiempo atrás.
-         ¿Quieres decir que estamos liberando nuestro pasado para que no intervenga en nuestra vida actual?
-         Aquel que fuimos fue creado con un tipo de energía. Ésta ya no es la misma que años o decenios atrás. Todo ha cambiado, por eso, las profecías de Nostradamus no se cumplieron. Las energías han cambiado para que podamos llegar a aquel quien cada uno es, y a la vez, todos somos. (Pausa). Ahora son tiempos de definir nuestra vida, los pasos que queremos seguir y la cualidad que cada uno quiere tener. Por lo tanto, el pasado ya no tiene sentido en los tiempos que vivimos para ser nosotros mismos.
Después de una pausa más larga, David continua diciendo:
-         Vuestro corazón os dirá qué hacer. Escuchadlo y no dudéis de su guía. Aquel a quien se dirige es a vosotros.
-         Te conozco desde hace tiempo, ya hace unos años. He conocido parte de tu proceso y algunos de los pasos o momentos vividos a lo largo de él. A veces, para aquellos que puedan leer estas palabras, puede ayudarlos el saber cómo alguien como tú ha podido sobreponerse en momentos de los que se conocen como duros o difíciles. ¿Podrías comentar o detallar alguno de los aspectos que tú has podido seguir a lo largo de tu proceso en estos tiempos, y por momentos, tan movidos?
Después de un nuevo silencio alargado, me comenta:
-         Pertenecemos a un Hogar que no es de aquí. Nuestra verdadera Familia no se encuentra en esta encarnación. Raramente nuestros Familiares se hayan encarnados en este planeta donde vivimos. Ir a nuestro Hogar nos ayudará a recordar y a ver lo vivido desde otra visión más liberada de toda creencia o limitación que podamos llegar a tener. Algunos conocéis a nuestros Familiares amados como ángeles, maestros ascendidos u otros seres de Luz que conviven con nosotros en este espacio que vivimos en medio de nuestro universo. He tenido que ir a mi interior para saber de mí y de todo lo que estaba sucediendo en mi vida y mi entorno. Pude ver con claridad el motivo de todo. El fondo de lo que se podía percibir a través de nuestros ojos físicos. Más allá pude encontrar el verdadero sentido de todo lo que estaba sucediendo en cada presente de mi proceso o del momento que con ellos estaba. Ir a nuestro interior nos permitirá liberarnos de lo adquirido para sentir lo esencial de nosotros: nuestra verdadera esencia: el Amor, aquel quien somos.
-         Coméntanos alguna pauta de cómo poder ir a nuestro interior.
-         Si te sientas en un lugar cómodo o donde uno se encuentre bien, poniendo una música suave o que le guste, sin ser muy marchosa, cerrando los ojos y dejándote ir, seguro que vas a encontrarte bien y con ganas que estos momentos puedan alargarse. ¿Te imaginas este estado de tranquilidad, de paz y sosiego durante todo el día? Con este hábito cotidiano y poniendo nuestra intencionalidad para tener un espacio para nosotros cada día, nos ayudará a sentirnos bien y poder vivir aquel día sin quedarnos con una visión distorsionada de lo que fue o viví. Buscad momentos para estar con uno mismo y hacer actividades, cosas que os hagan sentir bien. Esto permitirá tomar vuestro empoderamiento interior y, con la práctica, rechazar, cambiar vivencias no queridas o crear nuevas situaciones que os permitirán tener una mejor cualidad de vida, o como mínimo la iréis introduciendo cada vez más en vuestra vida. Al final, escuchando a vuestro corazón, sabréis lo que mejor os conviene o no y qué dirección seguir en vuestra vida. Solo con la calma y paz interior podremos ver más allá de lo que se nos presenta ante nosotros.
-         Tengo que decir que he visto cambios en ti - intervengo diciendo. Cambios importantes que me han hecho acercarme más a tu ser y querer estar contigo cada vez más. Lo digo abiertamente y desde el corazón. Realmente cuando uno se libera de lo que se conoce como karma, entonces solo queda él y todo su resplandor.
-        
-         Y tengo que decirte: GRACIAS por ser, y con el tiempo,  poderte llegar a conocer. GRACIAS.
-        
-         ¿Qué piensas de la Nueva Energía que nos encontramos? – le pregunto.
-         Aquellos que puedan darse cuenta de ella sintonizarán con su interior porque verán que ésta coincide con nuestra verdadera esencia, nuestra verdadera energía interior. La Nueva Energía no es una etiqueta más para definir los nuevos tiempos. No es algo teórico ni intelectual. La Nueva Energía es literal, perteneciente a nuestra esencia innata, debido a un aumento de la consciencia de nuestro planeta y a una predisposición, cada vez más, de una mayor parte de los habitantes voluntarios de este mundo, de este plano Tierra. Esta Nueva Energía nos activa nuestro ADN y nos está permitiendo a todo aquel que así lo desee dar pasos, digamos cuánticos, en su proceso ascensional para poder manifestar la Divinidad que cada uno es. Lo que está sucediendo en nuestras vidas es la liberación de todo lo limitado y denso que pueda llegar a existir en nuestro interior y en el planeta para elevar sus energías y crear una nueva Tierra y una nueva raza donde todos sean UNO y se conviva de una manera armónica con todos los seres vivos existentes de esta dimensión.
-         ¿Qué dirías de los movimientos y los acontecimientos que están sucediendo en las latitudes de cada uno?
-         Lo que denomináis oscuridad está dándose cuenta que está perdiendo su poder y necesita dar un golpe de puño sobre la mesa para hacerse notar e impresionar a todos aquellos, que cada vez son más, que quieren un cambio en sus vidas y un estado interior donde sienta el bienestar y el amor en su día a día, en su vida cotidiana. La vieja energía ya no tiene cabida en los tiempos actuales. Hay quien todavía quiere vivir en ella y quiere traer el pasado en el presente para que todo continúe igual. No quieren los cambios por miedo. Lo nuevo los aterra y su ego se rebela haciéndose oír allí donde podáis estar. Estos son los tiempos actuales, donde el cambio es un hecho y no hay vuelta atrás. La baja vibración se rebela y llama la atención para que se la tenga en cuenta, pero tienen los días contados. El proceso puede ser lento, pero lo vivido ya no tiene lugar en esta nueva Tierra que se está forjando a lo largo de todos los continentes de este mundo, porque en cada rincón hay una luz irradiándose hacia la intencionalidad de una Unicidad con todos los seres encarnados, y cada uno de ellos es esa Luz que permitirá, en su momento, dar el cambio tan esperado por nuestro verdadero ser.
-         Por lo tanto, David, no debemos de temer con lo que sucede porque es el prolegómeno de lo que será según la Voluntad Superior que rige el universo.
-         Vivimos momentos de grandes cambios, y todavía habrán más y de importantes en relación a cada uno de nosotros. Lo que te diría es lo dicho antes: escucha a tu corazón y sabrás qué hacer en todo momento y toda situación. Lo que vemos en la forma contiene un fondo que da sentido a nuestra existencia y a lo que vivimos. Aprendamos a abrirnos para saber del verdadero sentido de todo lo que vemos y experimentamos.
-         Gracias, pues, David por tus palabras y permitir que éstas puedan llegar a todos aquellos que puedan necesitarlas. Gracias por tu ser. Gracias por este encuentro nuevamente.
-         A ti – me responde finalizando el encuentro.