domingo, 26 de febrero de 2012

Las palabras de una abuela índia


Una vez una sabia anciana sioux se acercó donde se encontraban sus nietos jugando. Cuando los pequeños la vieron fueron directos a ella y, rodeándola, le dijeron:
- Abuela, háblanos de los hombres. Cuéntanos una historia de nuestros ancestros.
La abuela se sentó a la derecha de un tipi, a la vez que los demás se situaron en semicírculo ante ella. Todos callaron para poder escuchar la sabiduría de su “gran madre”.
Todos los ojos se fijaron en la profundidad de los de aquella mujer dispuesta a transmitir las historias que ella fue recibiendo y viviendo a lo largo de su vida. Finalmente, sus labios se separaron para iniciar el relato:

Cuando yo era pequeña, mis padres, que ahora se encuentran con el abuelo Sol y la abuela Luna, me llevaron al bosque. Cuando llegamos vi que habían otros niños y niñas con sus padres. Todos estaban sentados cerca del riachuelo que todos conocéis. Junto al Gran Árbol estaba el Gran Jefe “Ojo de Lince” esperándonos para hablarnos de la vida, de todos los hermanos.
Cuando ya estábamos todos se produjo un gran silencio de respeto para el venerable “Ojo de Lince”, jefe de vuestro pueblo. Entonces dijo: Os transmitiré aquello que los espíritus me han dicho. Se me apareció, entre ellos, mi abuela Osa Menor, quien se avanzó y me dijo:
- Para vivir en la tierra que os encontráis, vosotros y vuestros hijos debéis de seguir y vivir siguiendo los pasos que ahora te diré. Cuando lo hagáis, estaréis venerando a todo el Consejo Superior que velamos por vosotros, y abriréis el camino para vuestros hijos y los hijos de vuestros hijos para que puedan ser para siempre, libres y sentir el mundo de los espíritus blancos de la Luz. El Creador así me ha hablado:

1.       Agradece las bendiciones de la tierra y el Cielo. Bendice los alimentos y agradece la presencia de tus hermanos porque ellos te llevarán a ti.
2.      Sed honestos con todo lo que hagáis. Cuando vengan tiempos de escasez, sed honestos. Nosotros, los que nos encontramos al otro lado del velo, os protegeremos.
3.      Amad a cada uno de vuestra familia y a la gran familia de la Tierra.
4.      Todos sois Uno. Cada ser que viva en la Madre Tierra es parte de vosotros. Cuando el corazón de alguien es herido, repercute a toda la humanidad.
5.      No juzguéis ni critiquéis a aquellos que son diferentes a vosotros, porque representan la parte de vosotros que os permitirá uniros a los demás y al Gran Espíritu.
6.      Cuando alguien quiera romper los lazos de unión con vuestro pueblo, pensad que tiene miedo a la oscuridad de la ignorancia.
7.      Cuando os encontréis perdidos, conectar con la Madre Naturaleza. Ella os indicará el camino a seguir para reencontraros con vuestra alma.
8.     No hay mayor regalo que podáis hacer, que entregar el Amor que hay en vosotros a quien lo necesite. Este Amor procede de las generaciones de todos los que en algún momento vivimos en un cuerpo.
9.      Cuando un hermano se enfurezca, no lo rechacéis, comprendedle desde el corazón para que vuelva a sentir la unión con vosotros.
10.  El Abuelo Sol me ha dicho, también, que respetéis vuestros cuerpos, porque ellos os llevarán a las victorias.
11.   Dedicad cada día, unos instantes para recordar quienes sois y de donde procedéis. Esto os hará fuertes. Vuestro espíritu se elevará como las llamas de una hoguera. .
12.  Y doce: Abrid vuestro corazón porque él os llevará hacia el camino de la sabiduría y el liderazgo. Un pueblo tiene que estar dirigido por el Corazón de su Jefe. Todos nuestros corazones están unidos, siendo Uno con el Gran Espíritu.
Así es y será.
Finalmente, yo, “Ojo de Lince” quiero recordaros a todos, niños, jóvenes y padres presentes, ahora y aquí, que no hay mayor honor y orgullo para vuestro pueblo que ver la hermandad y la valoración de cada uno con quienes os rodean. Así, nuestro pueblo será fuerte ante los momentos que la historia nos hará vivir.
En aquel momento se produjo un largo silencio, mientras “Ojo de Lince” se sentó junto al árbol y cerró los ojos ante el riachuelo.
Los demás nos levantamos en silencio, teniendo presente lo que acabábamos de oír.
- ¡Abuela! – dijo uno de sus nietos - Yo también he tenido sueños que me han hablado.
- ¿Y qué te han dicho, Yuca (nombre del pequeño)?
- Te vi, abuela, como una gran luz, y de repente te vi como un águila volando muy alto y sonriendo.
- Cada uno de nosotros, llegará el día que volará como el águila, más alto que las montañas y nuestras hermanas las nubes.
Aquella noche se fueron a dormir, y al día siguiente, la anciana india sioux dejó su cuerpo para que su espíritu volara como el águila y reposara junto al Consejo de los Espíritus Ancianos.

Amad desde el corazón.
Algún día, vosotros también elevaréis vuestra alma hacia lo más alto, donde las águilas reposan de su vuelo, junto a las estrellas del firmamento.

Mitakuye Oyasin

jueves, 23 de febrero de 2012

La senda de la paz


Una vez encontrada la puerta que me ha llevado al centro de mi ser, resultaba sencillo ir allí donde mi verdadera esencia reposa y eleva su existencia. Sólo la dicha hace presencia abrazada del amor procedente de nuestro Hogar, hallándose éste no más allá de nuestra forma, sino en cada rincón de nuestro cuerpo, espiritual todo él, a pesar de la imagen que mostramos a nuestro entorno.
Es en la vacuidad del estado creado donde podemos sentir a todos los Seres de Luz y Amor, siendo nosotros parte de ellos. No hay diferencia entre cada energía existente de todos los presentes.
Hay una melodía celestial emanada del silencio de nuestra condición humana que nos lleva más allá de la dimensión en la cual nos encontramos. Es como abrir una puerta y ser transportados a un planeta alejado al que nos encontramos inicialmente. Por el camino sientes la inmensidad del firmamento. Eres como parte de él y la tranquilidad y calma que vas sintiendo van intensificándose a medida que vamos acercándonos al centro de quienes somos. Una vez allí, nos sentimos amados y velados por una inmensidad de almas luminosas que nos reciben y se alegran de nuestra llegada. Tus energías se funden con las suyas y entonces, entonces es cuando sientes el Hogar en ti. La Unicidad es plena, absoluta, total. Entonces te das cuenta que nunca has estado solo ni lo estarás y que en todo momento estás siendo velado, guiado y protegido por el Amor.
Sientes el cariño y la pureza de quienes te rodean, pero a la vez, como si estuvieran dentro de ti, como si tú fueras ellos y ellos tú. Sois Uno. No hay diferencia entre ellos y tú. Éste es el Hogar de donde procedéis.
El silencio es grande, pero en todo momento hay una emanación de sentimientos amorosos y positivos entre todos los que nos encontramos allí. Eres uno de ellos y ellos son parte de ti. Puedes consultar, comunicarte con estas entidades que sólo desean lo mejor para ti y los que se encuentran en el mismo planeta donde tu condición humana habita y todo el universo. Entonces sientes el verdadero Amor, el Amor puro e incondicional que a lo mejor, en algún momento, hayáis podido hablar o comentar estando en la forma. Todo va más allá y lo sabido se intensifica y magnifica. Nada es como lo leído o aprendido desde la mente u os hayan podido transmitir.
Con ellos te das cuenta del verdadero significado de la vida y del papel que podemos llegar a representar en nuestra dimensión experimentada. Más allá de la tercera, hay otras que te dan más explicación y entendimiento, muy superiores a los expresados con la palabra desde el raciocinio.
Siempre ha estado allí. Siempre ha estado en tu interior. Desde que nacimos, en todo momento hemos estado ante esta puerta hacia nuestra verdadera esencia. Muchas veces hemos pasado de largo, pensando que cuántas puertas inútiles hay en nuestro proceso, hasta que llega un día osas abrir una, y te das cuenta que al otro lado se encuentra un espacio donde lo soñado puede convertirse en realidad. Hay tantas puertas como inquietudes puedas llegar a tener. Otro día abres otra y te das cuenta que la esperanza no es ilusoria, sino real, y que tus anhelos son las advertencias del camino a seguir y no una utopía.
Cuando abrimos la puerta del Amor, entonces,….entonces todo cambia. Todo se transforma y toma un nuevo giro hacia tu realización y desbloqueo de aquellos aspectos de tu pasado.
A medida que vas entrando más en ella, vas encontrando otras puertas que te permiten adentrarte justo allí donde quieres llegar: a la plena Consciencia de quien eres y lo que has venido a hacer.
Bueno, si tú eres de los que ya has conectado con el Hogar y sientes el Amor que eres y percibes tu Luz,…… ¡Bienvenido a Casa! No hay mayor gozo y sensación de bienestar que sentir de donde procedes y tu verdadera esencia.
Entonces te das cuenta y sientes que todo es y todo tienes.
Entonces te das cuenta que siempre lo has tenido y la vida te sonríe, a pesar de los pesares.
Entonces ves lo afortunado que eres por sentir lo que sientes.
Entonces te das cuenta de las bendiciones que tu alma recibe cada día.
Entonces sientes la libertad de Ser porque eres parte de la Creación y tu capacidad de crear.
Entonces, gracias por haber llegado a este punto de tu proceso, porque tú y yo somos Uno, y a la vez, Uno con todos.
No hay mayor alegría que recordar quienes somos. Estando en el Hogar, así es.
Encontrándote al otro lado de la puerta y habiendo atravesado su umbral, ya nada es como lo experimentado hasta el presente como humanos. La vida cambia y tu visión de la vida también porque tus sentimientos ya no son los mismos. Estos han sentido la exaltación de la plenitud, y cuando así es, ya nada será lo mismo. Nunca más. Recordarás esta puerta y la tendrás presente, porque en cualquier momento podrás, nuevamente, pasar al otro lado y ser tú.
Lo más maravilloso, es que cuanto más veces seas tú, ya no será necesario ir al otro lado, porque viviendo en estado de vigilia, tu corazón, tus células, tus pensamientos y tus obras serán guiadas por tu esencia amorosa, ….tu DIVINIDAD.
La humanidad, cada uno de vosotros se está dirigiendo hacia nuevas dimensiones en relación a la que nacimos. Estamos alterando la vibración de nuestro entorno, de nuestro planeta y el universo. Podemos sentir y vibrar a un nivel superior según nuestra condición humana. Podemos vivir en quinta dimensión en estos momentos del proceso evolutivo de nuestro amado planeta.
Sintiendo el Hogar en nosotros constantemente, te das cuenta de la realidad de lo que sucede a nuestro alrededor. Nada es lo que parece. Nos encontramos en una dimensión donde todo es metáfora y señales para el aprendizaje de nuestra alma.
¿Sabes? Tu potencial es inmenso. Eres un ser perfecto, aunque quizás todavía no seas del todo consciente. Saberlo ya es un primer paso. Sentirlo, te ayudará a llegar a tu plena integridad y manifestación.
Cuando me encuentro con mi verdadera Familia de la Luz, Yo Soy Yo. Soy Uno con todo y con todos.
Yo Soy la Divinidad manifestada ahora y aquí.
No hay diferencia entre tú y yo. El Amor nos une. ¡Siente y deja que este Amor, la Paz y el sosiego sean en ti! Después,….todo será.

Desde mi corazón, un abrazo para todos vosotros. 

lunes, 20 de febrero de 2012

La Luz de las Palabras (56)


"El miedo solo es fruto de un pasado, perteneciente a nuestra mente, no al presente.  Es la expresión de la oscuridad de la ignorancia. "

Os recuerdo que los días 2, 3 y 4 de marzo se realizará la primera parte del Seminario "Conexión Divina". Para más informaicón podéis poneros en contacto con el Centro LA FONT de Cardedeu (Barcelona): 938455556. Si os va bien, podéis pasaros personalmente, encontrándose en la c/ Hospital 4 (en el mismo centro del pueblo).
Agradezco a los asistentes al Ciclo "Despertando la Divinidad" que se realizó este pasado sábado, donde en un ambiente familiar y distentido, pudieron hacer sus intervenciones con toda naturalidad para el mayor bien de todos los que éramos, abriendo sus corazones y sus mentes, llegando a sentir al verdadero ser que somos.
Los corazones cada vez resuenan más con todo aquello que procede del fondo de nuestra esencia. A los que vinísteis, gracias.

Un fuerte abrazo y que el Amor y la Paz sea en todos vosotros.





miércoles, 15 de febrero de 2012

El momento no es quien o qué, sinó el cuando

Esperamos nuestro momento, según cada uno, en un aspecto concreto de nuestra vida.
Esperamos y soñamos el instante donde nuestros sueños se harán realidad.
Buscamos y buscamos a la persona adecuada para poder llegar allí donde queremos llegar.
Buscamos a la pareja ideal para poder ser nosotros y poder tener la relación de pareja que tanto deseamos.
En el lugar donde nos encontramos no perdemos la esperanza de poder conseguir una mejor cualidad de vida en aquel aspecto concreto de nosotros. Esperamos que aparezca nuestra oportunidad y poder decir:
- ¿Ves? Ahora sí que he encontrado lo que quería. Gracias a tal persona o situación, he podido conseguir mis anhelos.
Nos pensamos que existe alguien o alguna (situación) que nos permitirá llegar donde queremos, pero en los cuentos alguien ha creado el final adecuado para convertir la realidad en metáfora y poder dar ánimos, coraje y esperanzas a aquellos que lo necesiten, es decir, a los niños, al verdadero ser que somos.
Nuestra vida no depende de un hilo, de la suerte de poder encontrar a alguien o estar en el lugar adecuado para conseguir “aquello2. ¡No! No es esta la verdad de nuestra situación o realización.
Nosotros, en nuestra vida, no dependemos de quien encontramos o nos viene, o de qué situación afortunada se nos presenta para elevarnos. ¡No! No es algo externo a nosotros que nos encontramos en el lugar adecuado. El verdadero secreto de nuestra realización se encuentra en el “cuándo”.
Cuando estamos preparados, entonces atraemos y vivimos nuestra liberación y voluntad realizada.
Cuando sentimos lo que sentimos desde el corazón; cuando pensamos lo que pensamos desde el Amor, entonces, es cuando atraemos y manifestamos nuestros sueños tan deseados.
Cuando estamos a punto, entonces atraemos nuestra “plena” realización. De nada sirve tener sino podemos disfrutarlo. De nada sirve conseguir sino lo valoramos tal cual. De nada sirve obtener sino estamos preparados para poderlo disfrutar. ¡Hay tantas cosas que se desean sin estar preparados!
¿Entendéis ahora por qué no es importante el quién o el qué, sino el cuándo?
Pocos se dan cuenta cuando es el momento adecuado. Normalmente, cuando se exige al universo que materializa nuestra Voluntad se obtiene una negativa por parte de él en el momento y hora que el ser humano dicta. No funciona así nuestro proceso. No depende de lo qué queremos, y sí de hasta qué punto estamos preparados para recibirlo.
Lo importante es el cuándo, no quién ni el qué o cuál. ¡No! Esto solo es fruto de la ignorancia humana ante la realización del ser humano. Esto es tener presente, solo, el aspecto racional para conseguir lo que queremos. El universo nunca nos dará algo que no nos sirva en aquel momento. Sería absurdo tener sin saber hacer uso del mayor regalo que se nos haya podido regalar en aquellos momentos, los que sean.
Nuestro avance no procede de una suerte de conocer a alguien en concreto, sino todo lo contrario; es decir, el hecho de estar preparados conocemos a la persona adecuada. No es cuestión de tener suerte y estar en el lugar adecuado para vivir la situación idónea, sino todo lo contrario; cuando estamos preparados, creemos nosotros mismos la situación para dar un nuevo paso de cara a nuestro proceso de evolución, de aprendizaje, para dejar de lado una parte de nuestro pasado y liberarnos, así, parte del lastre que hemos ido arrastrando a lo largo de nuestra vida.
Cuando estamos preparados abrimos las puertas de un potencial concreto que nos permitirá atraer aquello justo que necesitamos. ¿Nos gusta? ¡Perfecto! ¡Disfrutadlo! ¿No nos satisface o no es tal como queríamos? ¡Perfecto! Aprende de aquello y veamos que sincronicidad hay con nosotros por haber resonado en nuestro interior de la manera que lo ha hecho.
Nuestro camino está lleno de oportunidades según nuestro grado de preparación según nuestro proceso. Atraemos según estamos preparados. Ahora faltaría observar y preguntarnos:
- ¿Qué estoy atrayendo? ¿Qué estoy obteniendo en mi vida?
¿Os dais cuenta de lo que quiero decir? Lo importante no es lo que conoces o lo que vives, sino el cuándo estás preparado para recibir todo lo bueno que la vida te tiene preparado.
No es cuestión de culpabilizar o de crear el concepto de un azar para dar explicación a lo que vivimos o el momento que nos encontramos. Es cuestión de darnos cuenta como sentimos, y saber hasta qué grado de recordar sobre mí mismo, para entender quién soy yo y el sentido de la existencia.
Cuando somos plenamente conscientes de la importancia del cuando, entonces solo nos dedicaremos a ser nosotros para que llegue el momento esperado según sentimos que ha de ser. Normalmente acostumbra a ser mucho más grande de lo imaginado, porque los sentimientos de la consecución se activan produciendo la sensación amorosa de tu divinidad, en un grado superior, y esta vez, aceptándolo de una manera natural y con humildad.
El quién es fruto de tu estado.
El qué o cuál es el resultado de tu capacidad de atracción que tienes según tus energías actuales. Según eres, así atraes. Eres según vibras.
¿Te das cuenta que todo depende de en qué momento te encuentras a cada instante?
Cuando se está preparado, el universo se sincroniza contigo para bendecirte con las bendiciones que más necesitas a cada paso de tu camino. Todo es para que puedas elevar tu alma a niveles superiores.
Cuando estamos preparados, obtenemos.
Cuando todavía no está siendo así, vivimos y atraemos situaciones y otros seres que nos ayudan a prepararnos para cuando llegue el momento. Todo está sincronizado, y a nuestro favor. Todo se mueve para que nosotros podamos ser nosotros y poder conectar y manifestar nuestra divinidad.
Todo es Amor.
Cuando según nosotros no obtenemos, es cuando más se nos está dando para dar un paso importante hacia nuestro camino de Ascensión. ¡Los Maestros saben de la importancia de la escasez!
Todo es Amor. Nuestra vida es Amor. Aquello que no nos parezca que es así, estamos perdiendo el tiempo ignorando nuestra esencia y el no querernos responsabilizar de nuestra vida.
Todo tiene un sentido, y éste está abrazado por la intencionalidad divina por la cual hemos sido creados.
Cuanto más recordemos quienes somos, más nos prepararemos para recibir el cuándo y así poder disfrutar de aquello que sentimos que hemos venido a hacer. Cuando conseguimos materializar nuestra voluntad, entonces lo recibimos con naturalidad, sin grandes expresiones de euforia, porque sabremos que tenemos esta capacidad divina de crear vida y bienestar, tanto en nuestra vida como en la de los demás.
En todo momento tenemos aquello que necesitamos.
Lo importante no es el quién o qué, sino el cuándo.

¿Y tú, ya estás preparado/a para lo que quieres?





lunes, 13 de febrero de 2012

La Luz de las Palabras (55)


"No  es necesario moverse para llegar allí donde sea, solo se necesita SER para llegar a todos."


Que el Amor y la Paz sean en vosotros.

jueves, 9 de febrero de 2012

Sobre el amarse a uno mismo

Hoy, jueves 2 de febrero, está nevando. Hoy es un día para desfrutar de la belleza nevada que me rodea. Hoy el paisaje y la climatología me han hecho un regalo: ¡Hoy nieva!
Abierto a los imprevistos que la jornada te pueda aportar te permite disfrutar de la vida. ¡Es una manera de amarte!
Hace un tiempo alguien me preguntó si tenía algún escrito sobre “el amarse a uno mismo”. Hay quien me ha llegado a preguntar cómo hacer para amarse. Bueno, aquí unas palabras al respecto.
No hay un medicamento, una pastilla o jarabe que tomándolo ya nos amásemos, y de repente, sintiésemos el amor en nosotros. Muchos lo querrían, pero en cuestiones de sentir y manifestar el amor en nosotros, es una responsabilidad nuestra que necesita un proceso (éste depende de cada uno) para integrar una nueva manera de sentir, ver y vivir la vida.
¿Sabéis qué? La aceptación nos acerca a la autoestima. Cuando aceptamos aquello que el día a día nos aporta, es un primer paso para empezar a desengrasar a nuestro ser y permitir manifestar nuestra integridad. Las semillas necesitan de la tierra y la humedad. Cuando las regamos, aceptan el agua que se les da y la integran en ellas, en el momento de regarlas. Una vez aceptan, entonces se inicia el proceso de su crecimiento. No por más agua, más crecen. No por más que quieran, más rápido crecerán. Cada una, según la especie, necesitan más o menos y un tiempo para dejar que todo brote. No quieren correr. Absorben la bendición de la lluvia, y entonces, todo empieza. No tienen prisa. Se adaptan y son pacientes, porque saben que todo será. Cada día toman su dosis, lo necesaria para llegar a mostrar sus frutos. Son pacientes y se entregan a las manos de su benefactor porque saben que las regará con el alimento adecuado. No piensan. No protestan. Sencillamente son, están, aceptan.
De alguna manera, el ser humano para amarse necesita el alimento que ya tiene incorporado en él desde su nacimiento.
Si hubiésemos de definir qué es amarse, diríamos: “¡SÉ TÚ!”
Cuando eres tú, estás mostrando lo mejor de ti.
Cuando mostramos lo mejor de nosotros, quiere decir que nos sentimos bien interiormente.
Cuando así es, entonces es que estamos en paz con nosotros mismos.
Cuando estamos en paz con nosotros, es un reflejo que nos sentimos bien con nosotros, y todos los que nos rodean.
Cuando así es, es que sentimos plenamente el Amor en nosotros.
Finalmente, este amor comporta una gran sensación de bienestar, de ser protegido, amado, viendo la vida como una aliada nuestra, así como todo lo que nos rodea. Nos sentimos unidos a todos, y como que queremos a la vez lo mejor para nosotros y los demás, nos mostramos radiantes, positivos y sabiendo que todo lo que nos sucede es para nuestro mayor bien. Siendo así, pues no hay ningún motivo de preocupación. Todo es. Todo fluye. Entonces, tú eres quien rige y dirige plenamente tu vida, escuchando a tu corazón y teniendo el control de tu mente.
Para ser uno mismo, hemos d recordar quienes somos, y este es el paso que se encuentra gran parte de la humanidad en estos momentos. Unos nos encontramos en un punto del camino, y otros en otros puntos. Todos avanzamos, cada uno a su ritmo, como el crecimiento de una planta. Nos pensamos que nos falta mucho. Bien, yo te digo que te encuentras en el momento adecuado para dar el siguiente paso. ¡Enhorabuena!
Ser uno mismo es haberse liberado de su pasado. Si sacáramos de nuestro interior todo aquello que ya no nos sirve y nos limita para llegar a mostrarnos verdaderamente quienes somos, ¿qué quedaría? Nuestra verdadera esencia. ¡¡NOSOTROS‼ Por lo tanto, para amarnos, hemos de hacer limpieza de todo aquello que hacemos y no se corresponde con quienes somos realmente. La liberación de nuestro pasado es fundamental.
Llevamos años haciendo lo mismo, en el mismo ambiente, pensando según nos han enseñado, y avanzando hacia una dirección propuesta por quienes son o eran con nosotros en su momento. Hemos seguido esta directriz, todo y así, sentimos un malestar en nuestro corazón. Bien, ¿qué te parece si a partir de ahora escuchas a tu corazón y llevas a término aquello que te dicta? Este es el camino a seguir. Quizás te representará dejar relaciones, amistades, trabajo, actividades, alejarte de la familia y abrir nuevas puertas que hasta ahora no te atrevías a abrirlas por lo que dirán. Ha llegado la hora que la planta crezca y muestre sus frutos. Hemos de liberar nuestros miedos (nuestro pasado) y seguir las directrices que nuestro corazón nos indica, procedentes de nuestra verdadera esencia, del verdadero ser que somos,….de nuestra Divinidad.
Somos seres perfectos y completos. Ser nosotros nos permitirá mostrar nuestro potencial espiritual. Cuando así sea, entonces sentiremos el Amor en nosotros, y desprenderemos Amor. Entonces el Amor guiará nuestras vidas. Amor atrae Amor. Insatisfacción, más insatisfacción.
Para que un globo se eleve, necesita aire y desatarse del lugar que lo priva elevarse. En el ser humano, cuando más recuerde quien es, más amoroso se convertirá. Cuando así sea, se sentirá mejor ante la vida y cuando…..en fin, ya conocéis como continua el círculo de la autoestima y la felicidad.
Amarse es ser, sencillamente, uno mismo en esta vida. Es sentir el Amor en cada rincón de su interior. Es confiar en el Plan Divino al cual pertenece y entregarse plenamente a él, aceptando, con el aprendizaje incluido, todo lo que desde las altas esferas de la Luz le ofrecen como alimento de su alma.
Dejar los miedos es básico, como la poda que se hace anualmente a los árboles para que crezcan más fuertes y mejor.
“Allí donde hay Amor, no hay temor. Allí donde hay temor, no hay Amor. “
El silencio, la meditación, tener pensamientos positivos, amorosos, sentir los sentimientos más elevados en uno mismo y actuar, vivir, respirar y crear desde el corazón son, como se diría, “los remedios de la abuela”, que todo lo curan.
Entonces te sientes acogido, protegido, velado, acompañado y amado. Entonces te pones, todo tú, a las manos de Dios.
La autoestima es el bienestar del espíritu, la conexión con nuestra verdadera esencia. Todo es Amor. Solo existe el Amor y este reside en tu interior y en cada ser y objeto que tus sentidos puedan captar. Todo lo que es Amor. Ha estado creado desde el Amor, porque la creación que muestra su belleza y nutre nuestro corazón, tiene una finalidad divina, y tú eres parte de ella.
Miro por la ventana y continúo viendo los copos de nieve balanceándose en su caída hasta el lugar indicado. Todo está cubierto. El blanco radiante ha impulsado a mi voluntad a fotografiar con el móvil lo que mis ojos contemplan en el silencio, sintiendo la belleza dentro de mí.
Agradezco esta postal, ante mis ojos, creada para recordar quién soy, y poder sentir la unicidad con el Hogar.
¡Gracias!. Porqué me amo,…..lo acepto y tomo consciencia de lo que está despertando en mí.



lunes, 6 de febrero de 2012

Seminario CONEXIÓN DIVINA I

Me complace anunciaros una nueva convocatoria de la primera parte del Seminario “CONEXIÓN DIVINA I”, para los primeros días del mes de marzo, 2,3 y 4 (viernes, sábado y domingo), en la población de Cardedeu (Barcelona).
Los horarios serán, para todos los días, de 10h. a 14h., y por las tardes de las 16h. hasta las 20h.
Nos dirigimos hacia el Gran Despertar de la humanidad, y el planeta nos acompaña preparándose para que todos los que quieran, puedan hacerlo.

La apertura del corazón permite sentir la divinidad que cada uno es, y cuando esto sucede, la transmutación en el DIOS que cada uno es, permite ver, sentir y obrar según la naturaleza que somos. Entonces, todo es posible.

El Seminario consta de dos partes, y de aquí pocas semanas realizaremos la primera, la cual nos abre la puerta de la apertura interior, del sentir y de la conexión con nuestra energía divina, con el Dios que hay en cada uno y empezar a practicar la Sanación, la Percepción, el Sentir y la Materialización en nuestra vida. El Sanador pide paso, a la vez que empieza a llamar a nuestra puerta el Maestro Interior.
Todos aquellos que sintáis en vuestro corazón la resonancia de estas jornadas y creéis que ha llegado el momento de dar un nuevo paso en vuestro proceso, o queráis más información al respecto, podéis llamar al teléfono que consta al final de esta presentación.
El Seminario estará dirigido por su propio creador, Jordi Morella, Maestro Espiritual y sanador.

Guión del Seminario Conexión Divina: La Sanación del Ser I

1. Presentación: Breve historia de mi proceso.
2. ¿Qué es la Conexión?
3. ¿Qué nos aporta la Conexión?
4. Seres multidimensionales
5. Composición de nuestra esencia espiritual
6. El Amor
7. Síntomas del Despertar espiritual
8. La Energía Crística.
9. La lucha y el esfuerzo, obsoletas.
10. Los pasos de toda evolución
11. Los pilares del ser humano: emocional, mental, físico y espiritual
12. La dualidad: el papel en los desequilibrios. El ego
13. La Luz y la oscuridad
14. El ángel caído
15. Capacidad de crear y transmutar.
16. Ejercicios para la Conexión
17. ¿Qué es la Sanación?
18. ¿Quién sana?
19. Ser un Canal
20. Los resultados obtenidos
21. El paciente
22. El sanador
23. El ADN: Las diferentes capas.
24. Pasos de una sesión
25. Ejercicios prácticos
26. Los chacras
27. Equilibrio de chacras
28. Sentir
29. La Conexión y la visualización
30. Seguir les intuiciones de “nuestro corazón”
31. Vivir desde el corazón
32. Práctica de sanación entre los asistentes.
33. La Fuerza de la palabra. La plegaria. “Yo Soy”
34. Importancia del papel del autoconocimiento para la Conexión constante:
Voluntad Divinidad humana= Voluntad Divinidad Universal
35. La Sanación a distancia

Se recomienda hacer las inscripciones días antes a su inicio.
Este evento está organizado por el “Centre La Font” de Cardedeu, situado en la c/ Hospital 4. Tl. 938455556 (lunes por la mañana, cerrado).

Un abrazo.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Transición hacia el "Ahora posterior"

Vivo intensamente el presente, sintiendo cada instante de cada segundo, minuto e instante allí donde mi cuerpo y mi consciencia se encuentren. No siempre coinciden, todo y así, siento la intensidad de mi presente constante.
En estos momentos me da la sensación que aquello que ha de ser no acaba de llegar. Hay aspectos que parecen demorarse, pero nada es real en relación a la lentitud y estancamiento del proceso.
Nos encontramos en momentos claves de nuestra evolución, como humanos, y las energías están actuando como no lo habían estado haciendo hasta ahora. Todo se acelera. Todo avanza. Todo se mueve. Nada está parado a pesar de que nos pueda dar la sensación que está siendo así. Nada.
Recibo información más allá del raciocinio, y cuando me encuentro en el Hogar, siento la inmensidad del firmamento en mí, porque yo soy el universo en movimiento.
Soy consciente de mi proceso en mí, ahora. El servicio a la humanidad, hace que aquí donde me encuentro pueda ayudar a aquellos que lo necesitan en estos momentos. Mi familia está siendo “el plato fuerte” de lo que debo de hacer ahora. Ya hace tiempo me acerqué a ella y es desde hace unos meses hacia aquí donde veo resultados de mi presencia, a pesar de que a veces he habido de hacer saber a los demás mis decisiones, no siempre entendidas, o malinterpretadas por parte de algunos. He debido de reafirmarme y sentir la serenidad de mi corazón, para obrar con la firmeza del amor y la comprensión hacia aquellos que se encuentran implicados.
Hay momentos donde puedo estar conmigo. Según mi parecer, demasiados, permitiéndome un tiempo para mi alma y hacer aquello que me gusta y siento que debo de hacer. Alguien podría decir:
- ¡Mira qué bien!
Yo no digo nada. Acepto, siento y dejo que todo sea.
Estoy al servicio del Padre, y es Él quien me guía. Es Él quien me lleva donde debo de estar y qué hacer, cómo llevar a término su Voluntad.
Se me ha hecho ver lo qué ha de ser en mi vida.
Se me ha llevado más allá del espacio - tiempo para mostrarme mi vida de aquí a un espacio de tiempo no lejano.
He visto lo que será. Me he encontrado allí y he sentido las energías de aquellos momentos, así como las de todos aquellos con los que me encontraré. He sentido y he visto la actividad de mi vida en un “ahora posterior”.
Sé de ella y como me sentiré.
Sé cómo me verán los demás, e incluso, la repercusión que tendrá para mi entorno y planeta.
Sé de mi presente posterior en el ahora actual.
Mi interior vibra lleno de vida, ilusión, alegría y gozo de poder servir a la Fuente de toda Vida en este rincón del universo de nombre planeta Tierra.
Vuelvo a mi presente actual y vivo el proceso para llegar allí donde la Voluntad Divina ha permitido que conociera.
¡Sí!, ahora me encuentro en este ahora sabiendo de mi deseado ahora posterior. Sé que mi presente me llevará a él. Lo sé, pero no lo tengo en cuenta constantemente porque lo que es importante es el presente más inmediato. En él, me da la sensación que mi avance hacia mi voluntad es lenta, pero nada más lejos de la realidad. Todo se está acelerando para el mayor bien de todos. ¡De todos!, incluyéndote a ti y a mí.
Me doy cuenta de los momentos que no estoy haciendo “mi actividad” directamente con personas y queriéndola hacer. ¡Tengo tanas ganas de servir al Padre y llevar a término su Voluntad! ¡Y más sabiendo lo que ha de ser y dándote cuenta de tu presente que no es exactamente como te gustaría que fuese! Todo y así, que conste que lo acepto, y me siento agradecido por todo lo que la vida me está ofreciendo y dando. Me doy cuenta que no estoy parando de “trabajar” para todos aquellos que me rodean y habitan el planeta. Me doy cuenta que estoy ayudando a este planeta y al universo para que todo sea. ¡Sí, me doy cuenta! Incluso dormido.
El trabajo de un servidor de Dios no se detiene en ningún instante. Muchas veces puede dar la sensación que no se está haciendo nada, pero el verdadero Hijo de Dios sabe que no es así, que el tiempo que está viviendo y de la manera que lo ve, está con sus energías ayudando a alguien en algún nivel, y que su presencia no es en vano en este ahora, en el presente. No todo es remuneración, tal como se entiende. Entonces, el trabajador al servicio de la Luz y el Amor observa su entorno con los ojos de su corazón, viendo los frutos de su presencia, a pesar de que los demás no sean conscientes de ellos. Ve como la armonía se va aposentando tranquilamente en el interior de los seres que le rodean o convive. Ve como las decisiones tomadas en sus momentos están dando sus resultados paulatinamente. Ve que todo se dirige hacia el equilibrio, la paz y el bienestar, a pesar de que los que viven en la dualidad hacen intentos de malinterpretar y crear malestar. Ya no pueden con un ser iluminado. Ahora son ellos quienes se adaptan a él sin darse cuenta.
Mira todo esto y se da cuenta que nada está parado y todo se dirige hacia la manifestación del ser que vive en la condición humana de esta dimensión.
Muchas veces nuestro trabajo no se encuentra ante grandes grupos o sesiones individuales o grupales, sino que a menudo, el verdadero trabajo del ser entregado a las manos del Padre se realiza cuando está solo o no tiene actividad con la gente. Es a menudo que conecta con el Hogar y hace su trabajo más importante, cuando está solo. Entonces se siente cómodo y libre, irradiando sus energías y dirigiéndolas hacia aquél o aquellos que más lo necesitan. Es entonces cuando acompaña a entidades, atrapadas en nuestra dimensión, hacia la Luz; o cuando recibe los mensajes correspondientes a realizar sobre lo qué ha venido a hacer. Es en estos momentos, donde incluso hace todo aquello para llegar a más almas de nuestro amado planeta, como es escribir y/o publicar en diferentes webs o blogs donde son leídos por seres de todo el mundo, transmitiendo la sabiduría del Hogar y la experiencia del ser que, siendo consciente de su divinidad, la vive en la dualidad desde el amor y el corazón. Es entonces cuando responde a diferentes e-mails que recibe consultándole aspectos personales o dudas de aquellas almas que, como él, siguen el camino de la Ascensión. Es entonces cuando medita y siente a los que están con él desde dimensiones superiores a la suya. Es entonces cuando conecta, elevándose, llegando a otras dimensiones como ser multidimensional que es. Es en estos momentos de no actividad aparente cuando eleva su alma, siente el amor que es y se reúne con el Hogar, más allá de cualquier espacio – tiempo.
Aunque el proceso pueda parecer ir lento, nada de todo esto es cierto, porque aquellos que se encuentran en las altas esferas de la Luz están ayudándonos en todo momento para que podamos llegar a dar nuevos pasos hacia nuestra plena realización y Ascensión.
El Amor os protege. Somos Amor y éste nos abre las puertas de nuestro proceso. Sintamos este Amor en nosotros y dejemos que todo sea.
¡Nunca antes todo ha ido y está yendo tan deprisa, jugando a nuestro favor, para que tú puedas ser tú!
¡Relájate y siente! Nada más debes de hacer para Ser.

¡¡¡SIENTE …y SERÁS‼!