domingo, 27 de noviembre de 2011

La Luz de las Palabras (51)


" Ahora sí estoy en el lugar adecuado, en el momento oportuno y siendo de la manera adecuada para poder deleitarme haciendo y atrayendo según se me ha estado diciendo,  y sintiendo dentro de mí, a lo largo de los años. "


(Os recuerdo que los próximos días 2, 3 y 4 de diciembre se realizará el Seminario "Conexión Divina I" en el centro Darsana de Granollers (Barcelona). Para inscripciones e información: 938795217)

Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Recordándomelo

Hace poco se me mostró un aspecto que hacía años ya se me dijo y ahora han vuelto a recordármelo.
Primeramente, debo de tener paciencia en este período final de una vida llevada hasta ahora. Me encuentro en el preludio, en la antesala de un gran momento tan esperado.
No debo de querer coger un atajo para llegar antes, porque, aunque el resultado ya está, no el entorno ni el lugar donde se ha de producir, tal como ha de ser en esta dimensión. Mantener la serenidad y escuchando a mi corazón, aunque éste me diga que no es el momento por cómo todo ha de ser y según mis anhelos y voluntad.
Ahora siento y veo con nitidez las energías y los estados de aquellos que allí serán, con mucha más nitidez. En su momento se me dijo la forma, y ahora siento el fondo de lo que será. Parece como si se me recordase lo que ya no tenía presente debido al hecho de vivir el día a día, el ahora y aquí. Vuelven a mostrarme lo que hace años se me dijo en relación a traer el Cielo aquí en la Tierra.
Yo continuo manteniendo la calma y la conexión con quién soy y el Hogar. Mantengo la serenidad de vivir una situación de servicio al Padre sabiendo que es lo mejor para todos los que estamos implicados. Lo acepto, amada divinidad en mí. Lo acepto, Padre. Acepto tu Voluntad en mí y si alguna vez ves que flaqueo, ayúdame y avísame que tú estás en mí. Si alguna vez no estoy siendo yo, amados hermanos de la Luz, ayudadme, dando ahora el permiso para que intervengáis y os pueda sentir y recibir vuestra presencia y lo que me debáis de decir.
Vivo momentos de poner luz aquí en la dimensión donde me encuentro actualmente. Mi familia me necesita. Haré todo lo que sienta que debo de hacer desde el corazón. Dejo que el amor me guíe para poder tener las palabras y la actitud adecuadas en mis intervenciones.
No tengo muchas ganas de hablar. Conversar con mi familia de sangre no siempre es fluido y entendedor. Tienen una fuerte conexión con la dualidad, identificándose con ella firmemente, con todo lo que esto conlleva. Estos apegos hacen que nuestras comunicaciones no siempre sean comprendidas, siendo malinterpretadas a menudo, al menos, mis palabras y actitudes por parte de ellos. Todo y así, acepto estos momentos y mi papel en toda esta situación que estamos viviendo. Lo acepto y hago aquello que siente mi corazón que se debe de hacer por mi parte ante lo que vivimos.
Las energías de la Ascensión están haciendo mella en mí. Por momentos no tengo ganas de hablar, sólo de estar conmigo y el Hogar, sintiendo la naturaleza que soy y rodeado de toda la Familia de la cual procedo y soy. A veces sólo actuaría sin hablar, pero soy la Palabra del Padre y expresaré todo aquello que Él me transmita, como hasta ahora. Haré todo aquello que se me diga, y que juntos acordamos antes de venir en esta encarnación. Me entrego a la esencia amorosa creadora de toda vida y de todo lo existente.
Me comunican aspectos de mi ser y lo qué debo de hacer. Me dan coraje para continuar. Yo me abro y siento mi corazón derramar el amor que soy. Soy Uno con quienes me acompañan. Cada vez los siento de una manera más clara y nítida. Cada vez los veo más.
No sé de qué hablar (en los artículos), porque cada vez veo que es más personal lo que escribo. ¡Quizás deba de publicar escritos como éste! Cada vez escribo más sobre aspectos muy personales y vivenciales de mi proceso. Si realmente debo de publicarlos, que pueda sentirlo de una manera clara y fuerte, para mostrar los pasos que estoy siguiendo y que muchos otros también los pueden estar viviendo, con variaciones, pero todos serán los apropiados para subir nuevos peldaños.
A veces continúo sin saber qué escribir. Quizás deba de publicar mis experiencias. ¿No quería particularizar mis escritos? Pues ahora es el momento perfecto para hacerlo. Si así ha de ser, así lo haré.
Cada vez siento más mi interior con toda la información que éste contiene. Cada vez percibo más las cosas y conecto de una manera más directa y nítida con el Hogar y todos mis hermanos de la Luz (ángeles, arcángeles, maestros, y otros seres de Luz, incluyéndote a ti, Padre).
Cada vez pienso menos y hago más según mi corazón. Cada vez más, dejo de hacer, interviniendo menos y ESTAR más. Sencillamente SOY. Cuando más así es, más me manifiesto.
Estoy viviendo en medio de una dualidad fortalecida, pero continuo sintiéndome centrado y conectado con quién soy y mis raíces divinas. Estoy, pero no como los demás. Hablo, pero no como lo hacen quienes me rodean. Actúo desde mi corazón y los pasos nos llevan hacia la mejor resolución para todos. Cuanto menos quiero controlar, más todo sale. Cuanto menos quiero responsabilizarme de algo que tengo entre manos, más avanzamos hacia el final de la situación que estamos viviendo.
No pienso. No controlo. No impongo,….sólo Soy. Entonces, todo es posible.
No soy diferente a vosotros. Soy Uno con todos aquellos que estáis leyendo estas palabras ahora. Soy Uno con cada uno de vosotros, y aquello que vivís, de alguna manera, yo también lo he vivido. Nos hemos conocido en otros tiempos, y no es porque sí, que ahora estas palabras nos unan nuevamente.
Seguimos el proceso de un Gran Plan Divino donde todos somos una pieza de este rompecabezas, y así, con la Unicidad, poder confeccionar con plenitud aquello que hemos venido a hacer.

Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.



domingo, 20 de noviembre de 2011

Un hijo con su Padre


Hoy me gustaría regalaros un fragmento de un encuentro del Padre Celestial con uno de sus hijos aquí en la Tierra. Fue una situación real. Empieza el ser humano expresando una sensación interior, comentándole a Dios:

- Siento con los días, cada vez más paz interior. Me siento seguro, seguridad, protección. Percibo como si estuviese blindado y nada me pudiese herir. Siento confianza y tranquilidad. Una vez oí unas palabras que venían a decir lo siguiente: “Mi corazón era un desierto, y ahora, la hierba crece en todos los rincones”. Siento protección y amor. No sé bien como explicarlo. Vendría a ser todo esto junto. ¿Sabes qué? Las palabras me resultan limitadas. Lo que siento es mucho más que esto que te he dicho. Es como si tuviese serenidad y escuchase, cada vez más, mi voz interior. Es todo esto junto. Es una sensación diferente. Nunca me he sentido de esta manera. Tiempo atrás sentí aun poco de algunos de los aspectos comentados anteriormente, pero como ahora,….no. Lo que siento dentro de mí es diferente. ¿Qué me pasa realmente?
Entonces el Padre le respondió:
- Mi hijo está creciendo y veo que él se da cuenta de todo el proceso. Se siente extraño porque experimenta la serenidad y la paz que Yo le doy. Percibe el Amor que le ofrezco y esto contrasta con lo que ha sentido durante tantos años. Mi hijo se está acercando a las puertas de la Luz del Padre y esto le remueve. Sabe que camina, pero cada paso es una novedad no experimentada hasta ahora, aunque sí deseada. Mi hijo experimenta, juega, aprende y crece siguiendo el camino que se ha marcado. No tengas miedo, amado. Sé valiente como ahora. Sabes lo qué quieres y eres decidido. Harás todo lo posible para llegar allí donde quieres. Lo conseguirás. El proceso será rico. Tú quieres pasar por aquí. Sabes lo qué quieres, pero no las situaciones a vivir para llegar al objetivo. Veo que llegarás. Veo fuerza y valentía en ti. Llegarás a conseguir en tu vida actual todo lo que te propongas. El Padre siempre estará contigo. Tu voluntad, en estos momentos, coincide con la mía. Has encontrado el camino principal que te lleva directamente a Mí. A veces, tus ganas te hacen tomar atajos que no te llevan a ningún lugar. Sabes como rectificar. Estás aprendiendo, hijo mío. Con el tiempo, aprendes cada vez más rápido. Todavía queda mucho, pero me alegro que hayas entendido que el tiempo no existe, cuando se trata de evolucionar tu espíritu. ¿Me has entendido lo que quiero decirte?

Y tú, ¿le has entendido?

Un fuerte abrazo y que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.



miércoles, 16 de noviembre de 2011

El Cielo en la Tierra


Las palabras de hoy son especiales para mí. Durante tiempo las he mantenido en la privacidad, pero hoy he sentido la guía de los que me acompañan, conforme debía de expresarlas para todos aquellos que las leáis. Por lo que parece, ha llegado la hora de manifestar lo que durante años fue información para mí ser. Mis acompañantes me han comunicado que os las ofrezca.
Con toda mi humildad y desde el corazón os las transmito:

Llevo muchos años conectando con el Hogar de donde todos procedemos. A medida que va pasando el tiempo de nuestra dimensión, las puertas con las dimensiones superiores a la nuestra van abriéndose, cada vez más.
Mi vida ha ido abriéndose paso entre la dualidad, llegando a un punto donde dejé de aceptarla, adentrándome hacia el mundo sutil de lo no material.
Vivía en la materia, pero mi mundo interior seguía su instrucción hacia la espiritualidad del ser, dejando de identificarse con lo enseñado e instruido desde el raciocinio, la cultura, las pautas sociales y la religión de donde nací.
Mi ser necesitaba una liberación y decidí, en su momento, manifestar el libre albedrío para sentir y recordar quien era yo con todo mi potencial según mi naturaleza, que por supuesto, no era la forma.
A medida que iba creando mi espacio, iba conociendo el ser que era. Recordaba vidas pasadas, entendiendo mi presente. Retiré el velo vetado durante años y pude ver, sentir y comunicarme con mis hermanos de la Luz, habitando en la quinta y otras dimensiones.
Me hablaron durante años y la manifestación de mi potencial, Uno con ellos, iba en aumento.
Empecé de una manera notoria a entender el por qué de ciertas sensaciones e inquietudes, así como el entendimiento de mi ser y mis preferencias en este mundo actual. Iba entendiendo mi vida y la de los demás. Mi universo interior era Uno con el universo físico y el de todos los que me rodeaban.
Durante años recibí una formación espiritual por parte de mis hermanos de luz, como les decía. Se me presentaron todos los que en aquel momento formaban el equipo de la Hermandad de la Luz, mis guías, que velaban por todo mi ser, mi alma.
Uno a uno fueron presentándose comunicándome el por qué de su presencia en mí. Entendí mucho más, entonces, el por qué estaba siendo lo que era y todo lo que sentía.
Mi alma se elevó más allá de lo terrenal.
Con ellos supe qué había venido a hacer, y con el paso del tiempo tridimensional, sabiendo cada vez más, cómo llevar a término mi función en esta vida.
Varias veces, en diferentes momentos me transmitieron lo que había venido a hacer. Supe en seguida, que esto debía ser así. Hubo una resonancia interna en mi interior, mostrando unos síntomas físicos en mi biología que aprendí a interpretar cuando algo que “oía o sentía” sintonizaba y resonaba con la veracidad y la certeza en mí, según un Gran Plan Divino:

 
“Traerás el Cielo a la Tierra.
Abrirás los corazones y las puertas de todos aquellos
que vengan a ti para liberar sus limitaciones y
mostrarles el camino de su divinidad.
Les mostrarás el camino para llegar a Mí, el Dios que cada uno es.
Serás puente para que pasen de la dualidad a la divinidad,
y puedan mostrarse según su verdadera naturaleza.
Tu palabra será la mía.
Yo seré quien hablará a través de ti.”

Durante años estuve en la discreción, instruido por Seres de la quinta dimensión y más.
Llegó un momento que para poder llevar a la humanidad el mensaje recibido a lo largo de los años y lo pactado para esta encarnación, me “hicieron bajar a la terrenalidad”. Fue tan brusco el acercamiento a las vibraciones de esta dimensión que lo que viví, fue como “una adaptación comprimida” – en poco tiempo- porque mi función necesitaba manifestarse dentro de poco. “Bajé de la nubes” – como se diría – para conocer a la humanidad del día a día, enraizada fuertemente a una dualidad.
Tenía que experimentar el convivir con todas las emociones más humanas, y aprender a la vez, saber mantenerme conectado en mi centro interior. Aprendí a vivir en la materia para poner mi Luz allí donde se requería. Cuanto más aceptaba las vibraciones de los demás, más fortalecía las mías sin dejarme llevar por ellas. Para mi condición humana fue un “duro golpe”.
Actualmente sirvo a la Fuente de Todo y Todos, siendo Uno con ella y con todos los seres más allá de nuestra dimensión.
La discreción en la cual me encontraba, hicieron que fuera cambiada por la presencia, cada vez más constante en mi entorno.
Mi corazón me dicta qué hacer a cada instante, siendo protegido, velado, guiado y amado por mis hermanos de la Luz, que juntos, llevamos a término la Voluntad Divina.
Ayudo a Despertar las Consciencias y que el ser humano pueda dar un paso más para liberar y manifestar la divinidad que es.
Con toda mi humildad expreso estas palabras impulsadas por los designios de mi verdadero ser, y mostrar así, la Voluntad Divina en mí.
Soy Uno con vosotros, de igual a igual, unidos por el corazón y la naturaleza que somos.
Todos somos Uno, donde cada uno aporta su presencia, y hacer así, aquello que hemos venido a hacer, elevando la vibración de nuestro amado planeta y la consciencia colectiva de la humanidad.
Sigo el camino de lo pactado en mí con Amor, Aceptación y Comprensión.
Recordar nos llevará a la opción de manifestar con plenitud al verdadero ser que somos.

Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.



lunes, 14 de noviembre de 2011

Actividades


El  próximo viernes, día 18 de noviembre, se realizará una charla en el centro Darsana de Granollers para presentar el Seminario "Conexión Divina".    
La conferencia está abierta a todos y es gratuita. Empezará a las 20'15h.
Por otro lado os anuncio, también, la realización de la primera parte del Seminario los días 2, 3 y 4 de diciembre.
Aquellos que estéis interesados, bien por las inscripciones o más información, podéis llamar al teléfono de Darsana: 938795217.

El centro Darsana está situado en la c/ Bruniquer 3, bajos, de la población de Granollers (Barcelona).
¡¡Os esperamos!!

Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.

jueves, 10 de noviembre de 2011

De servicio

Llegas a un punto de tu proceso del Despertar la Consciencia que te das cuenta quien eres realmente y lo que has venido a hacer. Te das cuenta de la Unicidad con todo lo que te rodea, el universo y lo existente. Hay un momento que tomas la consciencia necesaria que tú eres una pieza de un gran puzle, para manifestar un Gran Plan Divino, donde toda alma encarnada en nuestro mundo tiene su papel concreto, único e individual que nadie más lo puede hacer en relación al entorno donde se encuentra, teniendo una repercusión, a la vez, por todo el planeta y toda la humanidad.
Llega a un punto el ser humano que ve la existencia de toda vida desde la cima de la plena consciencia, Una con Dios.
Cuando más nos acercamos al darnos cuenta de quienes somos realmente y por qué estamos aquí, más nos entregamos a las manos de la Fuente Creadora de toda Vida, más ponemos nuestra vida, nuestro ser y nuestra alma a las manos de Dios.
Cuando sintonizamos nuestro interior con el flujo del universo, con las energías amorosas de la creación, entonces, nosotros formamos parte de ella y dejamos que este Plan Divino actúe en nosotros llevando a término aquello que hemos venido a hacer en esta encarnación, y en concreto, lo previsto según el momento que nosotros nos encontramos dentro de nuestro proceso.
Llega un momento que nos entregamos del todo a la Fuente, y es entonces cuando entramos a formar parte del servicio del Amor, la Consciencia y la Verdad del funcionamiento de este Gran Plan Divino.
Llega un momento que dejamos de programar porque ya se nos indicará a través del corazón qué hacer a cada instante y cómo hacerlo.
Llega un momento que estás de servicio a cada instante de tu vida, y entonces, es cuando ésta toma el sentido que tiene, apareciendo tu ilusión al llevar a término la Voluntad Divina aquí en nuestro planeta Tierra (Gaia). Entonces, tu vida toma otro matiz porque estás de servicio constantemente. Cuando así es, te dejas llevar y aceptas todo aquello que se te presenta porque te está llevando hacia el lugar adecuado y el momento oportuno para dar el siguiente paso, no sólo para tu evolución, sino también, de cara a la realización de esta Voluntad Superior para el mayor bien de todos y todo el universo y el firmamento.
Aceptas y observas. Sientes y aprendes. Escuchas a tu corazón y lo abres con todos aquellos que están contigo en aquel momento, tus hermanos de la Luz, porque la Unicidad la Unicidad es plena, fuerte y firme. Entonces, es cuando estás haciendo lo que has venido a hacer. Entonces, te encuentras en el lugar adecuado y el momento oportuno para traer el Cielo a la Tierra, acercando a Dios a cada ser necesitado de su presencia.
Ahora me encuentro de servicio.
Hay veces que allí donde te encuentras necesita toda tu dedicación, y cuando así es, la divinidad en ti te libera de todo aquello, o parte, de lo que estabas haciendo hasta ahora para poder servir con toda tu energía a aquellos que te has acercado. A veces no es necesario que se paralice o se te quite lo que estás haciendo porque con tu presencia ya es suficiente, sin ninguna interferencia en el lugar donde ahora estás, en medio de unas almas para ayudarlas a encarar momentos supuestamente adversos en sus vidas, ofreciendo un aprendizaje para sus almas, y así, dar la oportunidad que puedan elevarse un peldaño más en su camino de Ascensión. Es necesario que pongas tu Luz y tu Amor en un solo lugar (y todos nos beneficiamos).
Esto es lo que estoy viviendo en estos momentos ahora.
Se me tuvo que liberarme de la casa donde me encontraba, el pueblo donde vivía y alejarme de seres que hasta el momento me estaba relacionando. He llegado a entender el por qué. Todo tiene un fin superior.
Tuve de acercarme nuevamente a mi familia de sangre, años después de un alejamiento. Mi manera de ser no era aceptada en su seno de dualidad fortalecida.
Bien, llegó el día que el Hogar me acompañó en el acercamiento para poner la Luz, el Amor que todos tenemos, e integrarme en ellos, enraizando la espiritualidad en su terrenalidad.
No hay ningún destino que uno pueda llegar a hacer que no se pueda realizar. Vamos a allá donde se nos necesita según como somos y siempre, absolutamente siempre, estamos preparados para finalizar con éxito lo que se nos ha encomendado.
Actualmente percibo el sentido de mi presencia aquí donde estoy. La relación con mis padres ha sanado, y los acontecimientos que han ido apareciendo a lo largo de mi estancia con ellos, ha servido para dar los pasos idóneos con la actitud adecuada y creando unos fuertes y seguros pilares hacia la resolución de todo lo que está sucediendo en estos momentos, en relación a la desestructuración de antiguas situaciones para que cada uno pueda ser él y permitir el acercamiento entre miembros de la familia.
Cuando se está de servicio con plena consciencia de lo que estás haciendo y sabiendo cuál es tu papel en toda la situación que estás viviendo, sientes en todo momento la presencia de tus hermanos de la Luz contigo y la presencia del Padre en ti, porque tú y Él sois uno. Es Él, entonces, quien está actuando a través de ti. Es cuando te dejas ir del todo para que Él lleve el timón de tu actuación, tus obras. Tú solo debes de escuchar a tu corazón para saber cuál es el siguiente paso a dar, y por cierto, es el que, sea cual sea, será el adecuado. Así lo he podido comprobar, no siempre teniendo el suporte y el entendimiento de aquellos que me rodean, pero con los días, se ha ido viendo que todo se colocaba en su lugar, dando paso a una oportunidad para que todo acabe bien.
Siento la fortaleza, la serenidad y la calma en mí, sabedor que todo está siguiendo el perfecto curso para el mayor bien de todos. Voy viendo los resultados desde la consciencia, viendo también, milagros inexplicables a lo largo de mi estada en este servicio familiar, en el cual me encuentro actualmente.
En un principio puede parecerte que no es aquí donde debes de estar, pero después, te das cuenta que, a más a más de servir al Padre dentro de mi familia terrenal, también mi alma se beneficia, fortaleciendo mi espíritu y permitiéndome mostrar mi esencia, mi espiritualidad en lugares donde la dualidad está fuertemente enraizada. Estoy aprendiendo, a la vez, a mostrarme como soy en lugares donde mi manera de ser es, inicialmente ignorada, no aceptada y en alguna vez, menospreciada.
Cada situación en esta dimensión tiene dos direcciones: una la de servicio hacia los demás, y la otra, para ti, y poder así, subir nuevos peldaños en tu proceso de Ascensión, mostrando con más fuerza tu divinidad aquí en la Tierra.
Cuando uno se encuentra de servicio, está recibiendo toda la ayuda que necesita para llevar a término aquello que debe de hacer, y siempre, se consigue desde el amor, la consciencia. Nada le falta. Todo lo tiene, a pesar que su actividad que estaba haciendo hasta entonces, hubiera sido otra o hubiera mimbado.
Cuando te entregas al servicio de DIOS, ya no debes de preocuparte más, porque la alegría, el gozo y la plenitud son infinitas.
Sentir quien eres y de dónde vienes da consistencia a tus fundamentos como ser que eres, como divinidad manifestada en esta encarnación.
Sentir el Hogar en ti y a Dios en cada célula de tu cuerpo, te permite conectar con tu omnipotente y amorosa naturaleza que cada uno es.
Entonces te das cuenta, a nivel práctico – como se diría –, que solo existe el Amor y que desde el Amor todo se puede sanar, equilibrar y abrir las puertas de vuelta a Casa.

Que el Amor y la Paz sean en ti.



lunes, 7 de noviembre de 2011

Sobre el Congreso "Vivir en la Luz y el Amor"


El martes, día 1 de noviembre se realizó en Barcelona el Congreso “Vivir en la Luz y el Amor”.
Quiero agradecer, antes que nada, a todos aquellos que asististeis.
El Congreso fue un encuentro, como dice el mismo nombre: de Luz y Amor.
Fue una jornada del corazón y la sabiduría de aquellos que expusieron sus diferentes ponencias.
Todos salieron del evento, dándose cuenta que alguna cosa había sucedido a lo largo de las horas. Los corazones se abrieron y la familiaridad con todo lo que se decía vibraba en el interior de todos aquellos que estaban, a pesar que aspectos o matices de los mensajes y sabiduría transmitida eran “nuevos” para los oídos.
Fue una Gran Celebración de la Luz y el Amor de todos aquellos que nos acompañaban del mundo espiritual y los presentes.
Las ponencias fueron realizadas con sencillez, naturalidad y espontaneidad, así como el desarrollo de toda la organización. La humildad y la sencillez fueron los dirigentes de todo lo que ahí se iba haciendo.
Gracias a todos, a Xavier y a Eugeni por sus presentaciones, a Silvia por creer en lo que sentía desde el corazón y llevar a término el acontecimiento, invitándome a hacer una de las ponencias. Gracias a Rosa, editora de la web “Hermandad Blanca” por colaborar en el Congreso haciendo la presentación del mismo y de cada uno de los que intervinieron.
El Congreso fue un éxito.
A todos, gracias, dejando la puerta abierta para nuevos encuentros desde la Luz y el Amor.

(En la foto inicial nos podéis ver, de izquierda a derecha: Silvia, Eugeni, Jordi, Xavier y Rosa).

Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros



jueves, 3 de noviembre de 2011

A veces....

A veces vemos como la puerta que tenemos delante está cerrada y no vemos más opciones que el desistir.

A veces sentimos el desencanto de lo que vivimos y la apatía, sin ilusiones para continuar nuestro camino.
Sentimos la impotencia de no saber qué hacer ante situaciones no queridas y que la vida nos ha puesto delante para hacerle frente.
Cuando a veces creemos que ya hemos hecho todo lo que estaba a nuestro alcance y probado los apoyos de quienes nos rodean y vemos que nuestra vida se encuentra detenida ante una puerta imposible de abrirla por más que nos esforcemos, entonces, es cuando todavía nos queda la SALIDA prevista para nuestra alma, nuestro ser.
En momentos que no vemos más salida que el desistir y aceptar que nosotros no podemos avanzar por al dirección que nuestros sueños nos muestran, entonces, y solo entonces nos encontramos ante el momento clave del aprendizaje y la oportunidad de tomar consciencia de quienes somos en verdad.
A veces,…..nos sentimos impotentes ante las supuestas adversidades que la vida nos da. A veces, por suerte, solo es a veces que nos vemos incapacitados ante lo que vivimos y el querer vivir según nosotros queremos. Cuando así está siendo y nosotros sintiendo en lo más profundo de nuestras entrañas, es cuando se despierta el cancerbero interior que contiene las llaves maestras de todas las situaciones de nuestra vida, tanto actuales como venideras.
“A veces”,….son los mejores momentos para la reflexión y la introspección para conectar con el verdadero ser que somos.
Nos sentimos presionados por las circunstancias de la vida, de nuestra vida. Nos sentimos acorralados no entendiendo porque siempre vivimos una misma situación o parecida en relación a los demás o a aspectos queridos por nosotros.
A veces no entendemos lo que nos pasa y por qué nos pasa.
A veces, en momentos de desespero buscamos a nuestro entorno un cabo donde cogernos y que nos saque de la situación vivida. Buscamos a alguien a quien podamos verterle todas las culpas de lo que nos pasa y de lo que padecemos.
A veces,…..nosotros no somos nosotros.
A veces no recordamos quienes somos y esto nos hace distorsionar nuestra realidad. Cuando esto sucede, dejamos de ser quienes somos y nos adaptamos e identificamos con todo lo que nos rodea. Cuando así es, estamos atrapados en la red de la anulación de nuestro ser, cediendo nuestro poder, como seres que somos, entregándonos a la merced de nuestro entorno social, religioso, cultural, político y social. Entonces, el “a veces” desaparece para convertirse en “para siempre que tú quieras”.
Sí, nosotros somos los responsables y quienes accedemos a dejarnos llevar por lo qué digan, y las normas establecidas y convencionalismos de nuestros bisabuelos, abuelos y padres.
Amado ser, tú eres mucho más que todo esto.
Es cierto que a veces nos sentimos sin salida, pero has sido tú quien te has dirigido hacia esta situación. Tú tienes el empoderamiento de convertir tu vida en aquello que tu corazón te permite soñar.
Tú eres un ser maravilloso que has apagado tu luz por identificarte con lo que te han dicho y ordenado.
Tu Luz ha dejado de iluminar, y cuanto más te adentres en los confines de tu mente, obedeciéndola, más atrapado te sentirás.
Tú naciste puro/a. Eres un ser maravilloso lleno de Luz y Amor. ¿Dónde están en estos momentos? ¿Dónde los olvidaste? ¿En qué momento dejaste caer por el camino tu verdadero ser y seguir las directrices de tu mente?
Amada Luz, eres un ser inmenso, completo y entero. El verdadero ser que eres contiene las semillas de tu inmenso potencial para crear la vida que todavía quieres. Te has olvidado de regarlas, y éstos, son tiempos ideales para darles un poco de humedad y calidez. Empieza a sentir el amor en ti, y esta puerta que permanece cerrada desde que llegaste, probablemente se abra para que tú sigas tu camino. Tal vez continúe cerrada, quizás te esté indicando que éste no es la senda a seguir, y que hay otras puertas que te están esperando para que las abras y puedas encontrar la felicidad tan anhelada.
No es porque sí, que te halles ante el camino bloqueado.
No es porque sí, que sientas lo que estás sintiendo.
Ha llegado la hora de subirte al Gran Cambio que se está produciendo dentro de los corazones de todos los que habitamos este planeta Tierra. Es la hora de las Consciencias, y seguramente, el Amor que hay en ti te está llamando a la puerta para que le dejes entrar en tu vida y te decidas, por fin, a dar el cambio que tanto deseas, dejando atrás todo aquello que ya no te sirve para todo lo bueno que la vida te tiene preparado. Para esto, deberás de dejar ir parte de tu pasado, sino todo él, para dejar espacio a lo nuevo, las llaves visibles para liberarte de los bloqueos y limitaciones que te han estado frenando hasta el presente.
A veces, no siempre aparenta ser lo que vivimos.
A veces, malinterpretamos lo bueno que la vida nos da.
A veces, dejamos de recordar quienes somos y permitimos que la ignorancia impere en nosotros.
La vida es tan simple, como para dejarnos ir según nuestro corazón, sin miedos, sin resistencias y sin los miedos adquiridos de generaciones anteriores relacionadas con nuestro parentesco de sangre.
Tú eres tú.
Tu Luz y tu Amor permitirán deshacer las durezas de lo vivido, como el calor derrite un cubito de hielo.
Pongamos calidez en nuestra vida y actuemos desde el corazón, haciendo aquello que nos haga sentir bien. Dejemos que nuestro ser recupere su fortaleza, su poder creador del mayor bienestar que nunca te hayas podido imaginar.
Cuando nos encontramos ante la puerta cerrada, sin más que nosotros mismos, recuerda que tienes el mayor tesoro que nunca te hayas imaginado: ¡Tú mismo/a!
Cuando te encuentres sin salida, siente la calma, el amor en ti, y deja que la sabiduría que hay en tu interior te guíe para poder dar el siguiente paso hacia la dirección correcta.
Sé paciente y acepta lo que vives, porque es el primer paso hacia tu liberación. Luego, aprende y siente que tu vida es como crees que ha de ser. Confía y permite que todo sea.
A veces, el “a veces”, no es más que el principio de una nueva vida y alegría.
Nada es lo que parece.

Que el Amor y la Paz sean en ti, amado ser de Luz.