miércoles, 28 de enero de 2009

El desamor te aleja de la vida

El factor más importante en la vida es el amor.
Cuando no dejamos que éste se manifieste en nuestro presente, nos alejamos del sentido de la vida. Hemos nacido para ser felices y no padecer. Se dice que el sufrimiento es parte de nuestra condición humana. Todo sufrimiento es fruto de un momento de desamor. Cuando su ausencia es presente, nuestra vida activa el mecanismo de defensa y reaccionamos desde nuestra condición humana, creando la inestabilidad en nosotros y el desequilibrio en nuestro entorno.
El corazón es quien rige nuestra esencia más amorosa. Cuando no escuchamos lo que nos dice, o bien no hacemos caso a nuestra sabiduría, nos alejamos de la vida, sintiéndonos mal. Nos pensamos que es la situación, y sencillamente es el resultado de no escuchar a nuestro corazón y no llevar a término aquello que nos dice.
¡Aparece tanto dolor al no sentir nuestro dolor y aceptar lo que recibimos…!
Si aprendiésemos a escuchar y a hacer caso a nuestro corazón, la felicidad sería posible.
Si dejásemos los miedos a un lado e hiciésemos caso aquello que nos dicta el corazón. Nuestra vida daría un giro entero en el momento.
Cada vez el corazón nos hablará más alto. Nos encontramos en la Nueva Era, la Era del Corazón, la Era de la Energía Crística. Ésta es una energía llena de amor, de alta vibración que nos permitirá desbloquear nuestra vida para poder ser nosotros. ¿Cómo queremos ser nosotros si no escuchamos lo que nos dice nuestro corazón? ¿Cómo queremos disfrutar de la vida si ignoramos lo que sentimos en nuestro interior?
El amor está en cada uno de nosotros, en cada célula de nuestro cuerpo. Todo nosotros somos amor, y cuando no lo manifestamos y actuamos según su esencia, nuestra vida se tambalea y nos hace sentir mal. El malestar que podemos llegar a sentir en estos momentos concretos es debido a no escuchar a nuestro corazón. ¿Que os hace miedo? Seguramente sí que os hace miedo pero alguna vez a de ser la primera vez que vayas a tu interior y percibas lo que sientes. ¿Que no estás acostumbrado? ¡Claro que no! De pequeños no nos enseñaron, pero ahora ya adultos, podemos vencer los miedos a lo que nos encontraremos y poder ser nosotros.
El desamor puede anularte completamente. Después dirás que son los demás, pero serás tú el único responsable de tu vida, porque tú has tenido la última palabra. Eres tú quien toma las decisiones en tu vida. Puedes ignorar tú poder y sabiduría interior, o aceptar y escuchar lo que te dice tu corazón. Cuanto más lo hagas, más te sentirás tú y la vida empezará a sonreírte. Mientras no sea así, querrá decir que estás bloqueando la energía en ti y frenando aquello de bueno que la vida te depara. Tus deseos quedarán bloqueados. Cada vez lo pasarás peor porque te darás cuenta que no te sentirás bien contigo ni con tu entorno. No tengas miedo de escuchar tu corazón y dejar que el amor sea en ti. Lo que sientas, no dudes. No te lo cuestiones, sencillamente, llévalo a término. Todo irá bien. Aquello que se te dirá, será para tu mayor bien.
El desamor es fruto de no ser uno mismo.
La falta de amor te aleja de tu esencia y de tu vida. Solo crea malestar y sufrimiento. Si así sucede contigo, ábrete y escucha a tu corazón, porqué en él encontrarás lo qué hacer para volver a ser tú. Confía y deja que todo sea según las directrices de tu interior. Tú eres amor, y es el amor que hay en ti quien rige tu vida. Deja que te lleve y confía que estás siendo llevado hacia tu mayor bien.
Así es y será. Todo irá bien.

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